Detenidos cuatro integrantes del homófobo «Proyecto Pilla-Pilla», entre ellos su líder

Cuatro jóvenes de entre 19 y 24 años han sido detenidos en Cataluña en relación al denominado «Proyecto Pilla-Pilla», un grupo que a imitación de los neonazis rusos se dedica a hostigar a homosexuales con los que contactan a través de chats haciéndose pasar por adolescentes y concertando con ellos encuentros para mantener relaciones sexuales. Entre los detenidos figura el que al parecer es el líder del grupo, el joven de origen ucraniano Mikola Zatkalnitsky, alias «El Rusky» (en la imagen).

En dosmanzanas ya se ha hablado (y opinado) sobre el Proyecto Pilla-Pilla, aunque hemos intentado no darle más protagonismo del estrictamente necesario para advertir de su peligro. Se trata de una iniciativa surgida de jóvenes de extrema derecha que durante días alcanzó gran eco en redes sociales gracias a su supuesta finalidad «cazapederastas». Su mecánica es la siguiente: contactan a través de chats de contactos con hombres adultos haciéndose pasar por adolescentes (siempre de sexo masculino), se ganan su confianza, y finalmente acuerdan con ellos mantener relaciones sexuales. Cuando la víctima del engaño acude a la cita, los jóvenes lo rodean, lo retienen, registran sus pertenencias y lo graban. De hecho han llegado a difundir como mínimo tres grabaciones en YouTube (luego retiradas). Se trata de la misma sistemática que sigue Occupy Pedofilyaj, una red de grupúsculos homófobos rusos responsables de numerosos episodios de violencia contra personas LGTB (muchas de ellas también adolescentes) y con la que comparten simbología: un puño cerrado con el pulgar hacia arriba pero doblado, en una posición similar a la de encender un mechero). El líder de Occupy Pedofilyaj es Maxim Martsinkevich, alias «Tesak», famoso neonazi que ya antes fue el inspirador de Format 18, organización racista que se hizo muy conocida por sus brutales agresiones a ciudadanos no rusos.

Tras los primeros días en los que el movimiento hizo bandera de la lucha contra la pederastia y consiguió miles de seguidores en Facebook y Twitter, poco a poco fue quedando en evidencia que no se trataba más que de una organización homófoba. La denuncia social fue creciendo, superando la «comprensión» inicial que el grupo encontró en redes sociales, y finalmente los Mossos d’Esquadra, la policía local de Les Franqueses del Vallès, la Fiscalía especializada en delitos de odio y discriminación de Barcelona y un juzgado de Granollers tomaron cartas en el asunto (la actividad del grupo se focaliza en municipios de la provincia de Barcelona). Los Mossos d’ Esquadra habilitaron incluso una dirección de correo (mossos.delictes.odi@gencat.cat) para que personas que se hayan podido ver afectadas por el grupo aporten información. La policía autonómica catalana también dio una serie de consejos a las personas que concierten citas con desconocidos a través de internet: recabar la mayor información posible sobre la persona, informar a alguien de tu confianza de sus datos y del lugar donde tiene lugar el encuentro, evitar en la medida de lo posible acudir solo a la primera cita y ante la más mínima sospecha llamar al 112.

Un momento de especial preocupación fue cuando en la madrugada del 18 de diciembre el grupo anunció en Twitter que tenía «a un pederasta bajo custodia», añadiendo que «esta vez se hará justicia». Afortunadamente los temores de que el grupo mantuviera retenida a una víctima no se confirmaron. Aunque muchos lo habréis visto, insertamos a continuación el reportaje que La Sexta dedicó entonces al grupo, en el cual se reproduce un fragmento de uno de sus vídeos. «Aprovecho mi cara y cazo gays», afirma su líder, Mikola Zatkalnitsky:

Mientras tanto, a lo largo de estos días no pocos medios se han dedicado a analizar la personalidad de Zatkalnitsky, del que entre otros aspectos destaca su gusto por difundir fotografías de sí mismo enseñando sus músculos e incluso su cuerpo desnudo. No sabemos si este personaje esconde una homofobia internalizada, como algunos comentarios en blogs y redes sociales han sugerido, o es simplemente un ultra homófobo más al uso. Lo que sí esperamos es que la justicia actúe de forma contundente para atajar un fenómeno especialmente preocupante.