Chirlane McCray, esposa del nuevo alcalde de Nueva York, se identificó como lesbiana antes de conocer a su marido
Bill de Blasio es, desde el 1 de enero, el nuevo alcalde de la ciudad de Nueva York. Antes de ganar las eleccciones en noviembre, de Blasio batió en las primarias a sus rivales demócratas, entre ellos la que al inicio de la carrera electoral parecía principal favorita, la abiertamente lesbiana Christine Quinn. De Blasio es en cualquier caso un político favorable a los derechos LGTB, y está casado con Chirlane McCray, poeta, escritora y activista política que en el pasado se identificó como lesbiana.
«I am a lesbian» («Soy lesbiana») es el título de un ensayo que Chirlane McCray publicó en 1979 en la revista Essence, dirigida a las mujeres afroamericanas, en el que la esposa del nuevo alcalde reconocía sentirse afortunada «porque descubrí pronto mi preferencia por las mujeres, antes de quedar atrapada en un matrimonio tradicional y tener hijos». «Sobreviví a las lágrimas, al aislamiento y al sentimiento de que algo terrible me sucedía por el hecho de enamorarme de otra mujer», escribía entonces.
El conocimiento de que Chirlane McCray se identificó como lesbiana y mantuvo relaciones con varias mujeres antes de conocer en 1991 al que ahora es su marido apenas si tuvo repercusión en la carrera electoral de este, algo que por otra parte no resulta especialmente sorprendente: de Blasio competía por la alcaldía de Nueva York, una ciudad especialmente abierta y tolerante por lo que a cuestiones de sexualidad se refiere.
Sí causó cierta sorpresa en algunos círculos el hecho de que McCray hubiera pasado de puntillas sobre su pasado personal hasta que en mayo pasado The New York Observer rescatara del olvido su ensayo. «En los años setenta me identifiqué como lesbiana y escribí sobre ello. En 1991 conocí al amor de mi vida, me casé con él y juntos hemos criado dos hijos maravillosos. Cada día me felicito a mí misma por lo afortunada que soy de haber encontrado a mi alma gemela», fue la escueta explicación que McCray dio entonces. Posteriormente se mostró más explícita y reveló en una entrevista a Essence (la misma revista que en 1979 publicó su ensayo) que con la misma naturalidad con la que a los 17 años salió del armario como lesbiana se enamoró de un hombre, «dejando de lado las presunciones que tenía sobre la forma en la que me llegaría el amor». En la entrevista, McCray destaca que en su momento sintió la necesidad de escribir «I am a lesbian» para contribuir a derribar el mito de que entre los negros no había personas homosexuales. «Era mi forma de decir a todas las mujeres negras [lesbianas, se sobreentiende] ‘no estáis solas'», declaró.
A la pregunta de si todavía le atraían las mujeres, McCray respondía con la misma naturalidad: «estoy casada y soy monógama, pero no estoy muerta, y Bill tampoco lo está». Eso sí, McCray rechazaba definirse expresamente como bisexual. «Soy más que una etiqueta. ¿Por qué la gente está empeñada en poner etiquetas sobre en qué punto del espectro sexual nos situamos?», respondía McCray, según la cual se trata de encontrar a la persona adecuada, con independencia de su sexo.
Más allá de estas cuestiones, todos los analistas coinciden en que Bill de Blasio y Chirlane McCray, pareja interracial y políticamente comprometida con la causa de la igualdad, cuenta con un gran potencial político en el seno del Partido Demócrata, que algunos comparan al que en su momento tuvo el matrimonio Clinton. Solo el tiempo dirá si es así…
Esta noticia se puede tomar desde diversos ángulos, yo creo que la orientación es algo plástico no estático.
Una persona que se siente atraída por varones y mujeres es bisexual, esté casa, unida civilmente o en una relación monógama; me parece una cursilería aludir a cosas tipo «me enamoro de la persona sin mirar el sexo» o «huyo de las etiquetas». No estoy diciendo que tengas que grabarte en la frente cuál es tu orientación sexual pero tampoco caer en el otro extremo al ser preguntado/a.
Pero bueno, es mi opinión, cada uno es libre de decir lo que quiera y más personajes públicos cuyas palabras se miran con lupa e imagino que tendrán que medir aquello que dicen.
Y por último decir que a mí como gai lo que realmente me importa es el apoyo y la defensa de los derechos LGTB por parte de políticos o figuras importantes de la sociedad. Así que si tanto ella como su marido están a favor de la igualdad LGTB me congratulo de ello, por otra parte sería difícil de entender que el alcalde de Nueva York fuese un homófobo repugnante al estilo del gobernador de Utah o el alguacil de cualquier pueblo de mala muerte de la América profunda.
No es tan «plástico», a mi no se me pone dura con una mujer , por muy estéticamente hermosa que sea.
Ella si es bisexual y creo que comparte novias con el marido , por lo que lei .
Pues se respeta al menos no se hizo homofobica . esto me recordó a películas de temática gay y lesbica con este tema de gays y lesbianas .hombres gays que se enamoran de mujeres heteros o lesbianas y mujeres lesbianas que se enamoran de hombres heteros o gays al final de la película algunos con finales abiertos.SON PELÍCULAS
digo aveces la realidad supera a la ficción.
He estado leyendo sobre este matrimonio en diarios conservadores y ninguno pone a Chirlane como ejemplo para que otras mujeres lesbianas se casen con un hombre.
Creo que no les hace mucha gracia que, tras su cambio de orientación sexual, siga siendo feminista (y negra). Nunca la considerarán un ejemplo.
5, bueno también es importante el hecho de que ella no ha renunciado a su pasado, simplemente ha dicho que ha conocido a una persona que es su alma gemela y ésta es un varón. Sigo pensando que es bisexual. Para mí la sexualidad sí es plástica, tanto en una dirección como en otra ¿alguien se acuerda de la escala de Kinsey?
Por cierto comentarios tipo «le pasa novias al marido» basándose en rumorología y sepa Dios qué más me parecen de lo más desafortunados.
comentarios tipo “le pasa novias al marido” basándose en rumorología y sepa Dios qué más me parecen de lo más desafortunados.»
Si ya lo veo que hay gente que no le a gustado , lo extraño , es la mentalidad colonizada por el seudomoralismo burgues de muchos gays ,
«asi que si alguien dice que comparten amantes es una acusacion» ,
y eso que solo en Argentina hay miles de swingers . ¿Cuando entenderan que los que tienen prejuicios contra los gays nunca cambiaran por fieles que sean ?
lo que dije lo dije como un dato , como si dijera «los dos salen a pasear con el perro juntos»
Ejem a ver , a mi este manipulador publico no me gusta , es humanofobico , y entiendo en el contexto de la noticia , que si hubo explotación , y si hubo abusos porque aquí no las fueron conduciendo a estas chicas desesperadamente pobres . Pero sacando lo del sexo pago , no me gusta para nada la deriva cada ves mas puritana de esta sociedad selectiva con las personas muy adultas .
la liberación sexual prometió a todo el mundo que se haría rico. Pero para que unos ganen otros deben perder. El fin de la monogamia no viene seguido de un paraíso hippie donde todos cogen constantemente con todos, puesto que el atractivo de cada uno difiere.
En un sistema sexual perfectamente liberal, algunos tienen una vida erótica variada y excitante, otros se ven reducidos a la masturbación y a la soledad especialmente los mas viejos . los más jóvenes recurren a las prostitutas incluso con más frecuencia que los adultos.
es un sistema despiadado donde los jovenes guapos y ricos tienen todas las mujeres que quieran, heteros , y los pobres feos o viejos deben recurrir a prostitucion , porque la gente ya no se casa a los 16 y sigue toda la vida . La moral represora repartia el cafe para todos , y se aseguraba de que nadie se quedara sin silla . Ahora el 80 % de las mujeres , busca el 20% de los hombres . Para los gays a sido una liberacion , pero los hombres hetero lo van a pasar cada ves peor