Las agresiones homófobas en Francia subieron un 78% en 2013, año de aprobación del matrimonio igualitario
Las cifras hablan por sí solas. La escalada de violencia verbal y física (alentada entre otros por los activistas de la Manif pour tous) que acompañó al proceso de aprobación del matrimonio igualitario en Francia se tradujo en un incremento de un 78% en las denuncias por ataques homófobos registradas en ese país por la organización SOS-Homophobie en 2013.
La organización contra la homofobia ha emitido su informe anual en el que recoge una cifra récord de 3.517 casos de homofobia frente a los 1.977 registrados en 2012. 188 de las denuncias fueron por agresiones físicas, aproximadamente una cada dos días y el doble que en 2013. Los afectados denuncian ataques directos y comentarios insultantes, incluso por parte de allegados cuya aceptación daban por hecha. Los homófobos se habrían sentido legitimados para dar rienda suelta a su odio por culpa de la virulencia de los mensajes transmitidos por los activistas contrarios a la ley del matrimonio igualitario durante numerosas manifestaciones. En lo que va de 2014, sin embargo, los niveles son similares a los de 2012, probablemente porque el debate ha quedado superado y el presidente François Hollande no se ha atrevido a cumplir otra de sus promesas electorales: abrir la reproducción asistida a las lesbianas.
Los datos de 2013 no responden, según el presidente de SOS-Homophobie, Yohann Roszéwitch, a un incremento de los sentimientos homófobos, sino al “fin de un tabú” que ha proporcionado la excusa para darles rienda suelta. “La homofobia se ha quitado los complejos. En paralelo, las víctimas también han roto el hielo”, al alcanzar la igualdad ante la ley y atreverse con más frecuencia, por tanto, a denunciar las violaciones de sus derechos. Roszéwitch advierte contra los comentarios malintencionados que no constituyen ataques personales directos, como por ejemplo “no sé porqué nos quieren joder con su matrimonio, si tienen el PACS que ya está muy bien” (el PACS o Pacto Civil de Solidaridad es una unión civil abierta a las parejas del mismo y de distinto sexo que confiere considerablemente menos derechos que el matrimonio).
Lo cierto es que el proceso de apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo se vivió en Francia en un ambiente de crispación y violencia inaudito. Bares de clientela gay violentados, manifestaciones diarias ante la Asamblea Nacional con constantes enfrentamientos con la policía, la jerarquía católica culpando a las víctimas de ser los causantes de la violencia, la agresividad en los discursos de los diputados opuestos al proyecto de ley sobrepasando todas las barreras, incluso la de la agresión física… La amenaza de la líder de quienes se oponen al proyecto de ley, la cómica Frigide Bajot, de que correría la sangre, se convirtió en realidad y en dosmanzanas hemos tenido que informar de agresiones como la sufrida por una pareja gay en París, la muerte por una paliza de un joven antifascista y participante en manifestaciones contra la discriminación o ataques a militantes LGTB por parte de fanáticos, entre ellos un concejal del ultraderechista Frente Nacional.
Puedes leer el informe completo de SOS-Homophobie (en francés) aquí.
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Humming Albus
Periodista de pega por el compromiso con una causa. La información también es activismo, y por eso participo en dosmanzanas.