Besada de protesta por la expulsión de una pareja gay de un Burger King de Madrid
Este sábado a las 18:00 horas tuvo lugar la besada que había sido convocada en redes sociales en el Burger King de la Plaza de los Cubos de Madrid como protesta por la expulsión de una pareja gay el sábado anterior. Decenas de activistas, la mayoría jóvenes, ocuparon pacíficamente el local, expresaron mediante besos su indignación y exigieron responsabilidades. El acto transcurrió sin incidente alguno.
En esta ocasión dosmanzanas no pudo personarse en el evento, pero hay abundante material gráfico de la besada en la web de la agencia Diso Press, que recogió lo sucedido y ha elaborado una galería fotográfica. El acto, que había sido convocado a través de redes sociales y al que se había sumado el Área de Libertad de Expresión Afectivo-Sexual de Izquierda Unida de la Comunidad de Madrid (ALEAS IU-CM), transcurrió sin incidentes e incluso fue acogido por aplausos por los trabajadores del local, que accedieron a colocar una bandera arcoíris. El local llegó a ofrecer, según Diso Press y también según algunos participantes en la besada que posteriormente lo contaron en Twitter, café y bebida gratis, que no todos aceptaron por considerarlo una operación de imagen.
El incidente homófobo, como contábamos hace pocos días, fue destapado por un tuit de @monicalilac. «Hoy han echado a una pareja gay de un burger king por besarse porque había niños delante», rezaba el texto. Según la versión confirmada por las víctimas, el vigilante de seguridad del establecimiento, tras atender las quejas de una familia con hijos a quienes les molestaba que se hubieran besado, les exigió abandonar el local.
En pocas horas, las redes sociales hacían el resto. Representantes del colectivo Arcópoli se reunían con el gerente del establecimiento para pedir explicaciones. Burger King, seguramente preocupada por la repercusión de la noticia, terminaba por emitir el lunes pasado un comunicado genérico en el que se desvinculaba de la actuación del vigilante y apelaba a su «larga historia dedicada a la diversidad, incluyendo apoyo para la comunidad LGTB. La diversidad es una fuerza impulsora para nuestra innovación y para fomentar un entorno incluyente para todos: empleados, franquiciados, proveedores y clientes de los restaurantes BURGER KING®». «El franquiciado que posee y opera este restaurante BURGER KING® tiene una política de cero tolerancia para cualquier tipo de discriminación y, al tener constancia de los hechos sucedidos, ha tomado medidas inmediatas para abordar el incidente», añadía, sin dar más detalles.
Arcópoli anunciaba finalmente su intención de interponer una queja formal y exigía además a la Comunidad de Madrid que promueva de una vez una ley contra la homofobia, la bifobia y la transfobia. Activistas con gran presencia en redes sociales, sin embargo, consideraron que la respuesta de los colectivos era tibia y mantuvieron la besada de protesta que había sido convocada en los primeros momentos, al calor de la indignación. El comunicado de ALEAS IU-CM en el que anunciaba su participación lo argumentaba del siguiente modo: «Valoramos muy positivamente el servicio prestado por Arcópoli, así como el de otros colectivos con otros sucesos. Pero consideramos que es imprescindible no abandonar las calles para visibilizar el aumento de una discriminación que sigue produciéndose con una frecuencia e intensidad alarmantes».
Esta organización se sumaba también a la petición de que Madrid apruebe una ley integral contra la discriminación hacia las personas LGTBI, «en la onda de la que ya ha sido aprobada en Cataluña«.