El gobierno equipara a las familias LGTB a otras familias «con problemas»: con enfermos graves, mayores, madres reclusas…
Aprovechando el tirón del 15 de mayo, Día Internacional de la Familia, el Consejo de Ministros aprobó este jueves el denominado Plan de Apoyo a la Familia con el objetivo de «mejorar la protección de las familias en todas las políticas y de forma transversal». Se trata de un conjunto de acciones entre las que se incluyen muchas ya en marcha, otras sobre las que en realidad el gobierno central no tiene competencia y alguna promesa electoralista, como la de subir las pensiones a mujeres con dos o más hijos. El anuncio del plan incluye una mención a las familias LGTB, que el gobierno incluye en el cajón de sastre de «familias con necesidades especiales»: quienes tienen enfermos graves, mayores, familias inmigrantes, de empleados en el servicio exterior o madres reclusas o exreclusas con menores.
Según el anuncio oficial, y a la espera de conocer los detalles del plan, estos colectivos cuentan con «medidas específicas», sin precisar nada más. Especialmente significativo fue que el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, encargado de presentar el plan en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros, se refiriera a estas familias con «necesidades especiales» como familias «con problemas diversos»:
A la espera, insistimos, de conocer los detalles, no parece desde luego muy prometedora la forma en la que las familias LGTB han sido finalmente consideradas en un plan que desde su inicio se planteó como un guiño del PP a su sector más conservador y al frente de cuya preparación ha estado la directora general de Servicios para la Familia e Infancia, Salomé Adroher, que en octubre de 2012 no tuvo problema en inaugurar el congreso “El matrimonio sí importa, el divorcio no es la solución”, organizado por el ultraconservador y homófobo Foro de la Familia, y para el que se ha contado, por ejemplo, con la colaboración de Acción Familiar, organización contraria al matrimonio igualitario y a la que se subvencionó con 18.000 euros para que elaborase un informe sobre la situación socioeconómica de las familias.
Colectivos LGTB: el «problema» es la LGTBfobia
Esa es también la impresión de los colectivos LGTB, que han expresado su desagrado por la forma en la que las familias LGTB han sido incluidas en el plan. La FELGTB ha señalado al ministro Alonso que «las familias LGTB no presentamos ningún ‘problema’ especial ni específico, los numerosos estudios realizados sobre nuestras familias tienen una concordancia en sus conclusiones al afirmar que nuestras familias presentan un grado de aceptación social elevado y un desarrollo intelectual y psicoafectivo adecuado». «Las necesidades específicas de las familias que formamos lesbianas, gais, transexuales y bisexuales pasan únicamente por promover un espacio libre de homofobia, bifobia y transfobia, donde la igualdad legal y administrativa acabe con las trabas que nos encontramos y donde se promuevan políticas educativas, sociales y sanitarias inclusivas que logren que la vivencia de la diversidad familiar sea reconocida como una riqueza social imprescindible», añaden desde la FELGTB.
El colectivo COGAM, por su parte, ha hecho uso de la ironía para agradecer al ministro que reconozca que las familias LGTB son familias «con problemas, ya que efectivamente somos víctimas de la LGTBfobia y el acoso que todavía siguen existiendo en la sociedad y en la administración, donde nuestras familias, nuestras niñas, niños y las personas que nos reconocemos como LGTB seguimos estando cuestionados, siendo vulnerados sistemáticamente nuestros derechos por la velada falta de iniciativa de este gobierno en la consecución y realización de acciones firmes que se plasmen en una legislación nacional que proteja a las personas y familias LGTB persiguiendo y condenando la LGTBfobia como ya han hecho Cataluña, Andalucía o Extremadura». COGAM recuerda la eliminación de Educación para la Ciudadanía, la retirada de la prestación sanitaria pública en materia de reproducción asistida a las mujeres sin pareja masculina, los problemas para que los menores transexuales accedan a bloqueadores hormonales, el convenio de adopción firmado con Rusia que asume la homofobia de estado en ese país o la negativa al asilo de personas LGTB. «El cajón de sastre en el que nos ha metido el ministro es un verdadero desastre. Creemos que el gobierno tiene la obligación de proteger especialmente a los colectivos que estamos siendo víctimas de delitos de odio y esto se hace legislando y desarrollando acciones eficaces para combatir la LGTBfobia y cualquier tipo de discriminación”, ha asegurado Jesús Grande, presidente de COGAM.
Fundación Triángulo ha exigido que se modifique el plan tanto en su contenido como en su lenguaje y pide al gobierno que las legislaciones sobre familias se basen en la diversidad y pluralidad como elemento positivo, y no contribuyendo al aumento de las discriminaciones y estigmatización de nuestras familias. «Es inadmisible que se siga legislando en materia familiar de espaldas a la realidad, nuestras familias no son problemáticas como insinuó el señor Alonso y por el hecho de ser LGTB no tiene problemas, nuestras dificultades nacen de la homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia de algunos sectores de la sociedad que sí tienen problemas y cuentan con el respaldo del gobierno», ha expresado Silvia Tostado, miembro del área de Familias de Fundación Triángulo. Un colectivo que acaba de hacer públicas sus reivindicaciones en materia familiar: dar marcha atrás en la exclusión de la reproducción asistida de mujeres sin pareja masculina en la sanidad pública; regular la filiación de los hijos e hijas teniendo en cuenta la realidad de la diversidad familiar actual, garantizando a todos y todas, en igualdad de condiciones, los mismos procedimientos; regular y reconocer la gestación subrogada en España de una forma garantista con respecto a los derechos de las mujeres y dar a todas las familias el mismo valor visibilizándolas y reconociéndolas en el currículo educativo, entre otras medidas que deberían incluirse en una ley estatal de igualdad.
Desde la Confederación COLEGAS han informado por su parte al ministro Alonso que «nuestras familias no tienen problemas y sí necesitan más protección y ayudas». «El gobierno debe interiorizar de una vez por todas que no existe un único modelo de familia, y que el modelo tradicional está pasando a una diversidad de modelos de familias que tienen los mismos derechos. Estamos cansados de la invisibilidad de nuestras familias, porque hasta en el nombre del citado Plan de Apoyo a la Familia, parece sólo hacer de un único modelo de familias, cuando debería denominarse Plan de Apoyo a las Familias”, ha declarado su presidente, Paco Ramírez. COLEGAS ha aprovechado también este 15 de mayo para insistir en sus reivindicaciones en este campo: una ley de gestación subrogada similar a la británica (que prohíbe el ánimo de lucro); resolver las lagunas legales que persisten en España sobre la filiación (en el caso de las parejas de mujeres, no se reconoce por ejemplo la maternidad de la pareja no biológica sin no existe matrimonio, a diferencia de las parejas heterosexuales); incluir en el catálogo de prestaciones comunes del Sistema Nacional de Salud los tratamientos de reproducción asistida para mujeres sin pareja masculina y fomentar la visibilidad de las familias homoparentales.
Luxemburgo: el primer ministro se ha casado este viernes con su novio.
http://elpais.com/elpais/2015/05/15/estilo/1431696309_279963.html
Pues si estoy enfermo, quiero una pensión.
Una pension y un vado!!
Queremos familias «normales» como la de Asunta Basterra o la de «La dulce Neus» o la de los marqueses de Urquijo.