El Opus Dei pierde la batalla legal por el control del dominio Opusgay.cl en favor de la asociación LGTB chilena MOVILH
El Opus Dei, una polémica organización ultraconservadora de la Iglesia católica (auspiciada por el español Josemaría Escrivá de Balaguer), ha recibido un duro revés al ser desestimada su petición de apropiarse del dominio de internet Opusgay.cl, administrado desde 2002 por el MOVILH (Movimiento de Integración y Liberación Homosexual de Chile). La prelatura ha sido condenada en costas, por lo que deberá pagar, además de sus propios gastos, los generados para la defensa del MOVILH. “Estamos tremendamente felices por este triunfo, que es un hito para los derechos de la diversidad sexual y en especial para los medios electrónicos que defienden y promueven la igualdad de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales”, manifiesta el dirigente Rolando Jiménez.
“En el conflicto por la revocación de Opusgay.cl y en cumplimiento de la resolución del árbitro de la controversia, se mantiene la inscripción del dominio, se elimina la solicitud de revocación presentada por la Prelatura del Opus Dei (el 9 de julio pasado) y se declara cerrado el expediente electrónico”. Mediante este mensaje, el Centro de Resolución de Controversias (CRC) de NIC Chile le comunicaba al MOVILH que podrá seguir disponiendo del dominio en disputa, desoyendo el requerimiento del Opus Dei.
La institución religiosa argumentaba en su demanda que el término “Opus Gay” genera “confusión en el público consumidor” y puede llevar a pensar a los visitantes que el sitio del MOVILH “es apoyado y patrocinado por la Prelatura”, ya que la pronunciación de “Opus Dei” y “Opus Gay” tienen un grado de semejanza “casi absoluto”. Según su punto de vista, además, el término “Opus” se encuentra “indisolublemente ligado a la Prelatura”. Sin embargo, como recordábamos desde dosmanzanas el pasado mes de abril (al publicar la noticia del litigio contra MOVILH) , “opus” no es más que una palabra latina que significa “obra”. Sobre esta hipotética confusión, el propio MOVILH veía “absurdo” el hecho de “argumentar que alguien podría pensar que las informaciones difundidas por Opus Gay son financiadas por la Prelatura. Este el caso más emblemático de irracionalidad y odio”.
El tiempo y la justicia, así pues, han acabado dando la razón al colectivo LGTB chileno, en detrimento del Opus Dei. El abogado defensor del MOVILH en este caso, Roberto Jorquera, considera que la decisión sienta un importante precedente en la inscripción de dominios. Por otra parte, Jorquera defiende que con el fallo ha quedado de manifiesto la inexistencia “de mala fe o peligro de confusión con la inscripción de Opus Gay.cl. Esto, porque los términos Dei y Gay se diferencian”, aún cuando la prelatura intentó demostrar que eran casi idénticos.
Ahora, a por los derechos de la marca impresa
En mayo de 2002 el MOVILH lanzó “Opus Gay”, la que fuera primera publicación sobre diversidad sexual producida en Chile, que estuvo en los quioscos hasta noviembre de ese año. Su versión electrónica siguió funcionando durante mas de una década. A la espera de reestructurar contenidos, la dirección www.opusgay.cl sigue remitiendo a www.movilh.cl (la web de la organización LGTB). Tras este avance, expresa el activista Rolando Jiménez, “lucharemos por obtener derechos sobre la marca Opus Gay para medios impresos, algo que la prelatura la logrado con éxito impedir desde el 2002 a la fecha”.
En 2002 el Opus Dei impidió al colectivo inscribir el nombre “Opus Gay” en el Departamento de Propiedad Industrial. Con un discurso más radicalmente homófobo y exaltado, la prelatura utilizó entonces argumentos como que “nadie, o casi nadie, se siente enaltecido por ser relacionado con la homosexualidad. En general, socialmente constituye una afrenta o, al menos, un motivo de burla, que se cuestione o ponga en duda la feminidad o masculinidad de una persona”. Al mismo tiempo instó al Departamento de Propiedad Industrial a no “dejarse llevar por la moda de aparentar ser liberal y tolerante, aceptando las excentricidades de un grupo por el solo hecho de pertenecer a una minoría”.
Además de felicitarse por la decisión favorable, el MOVILH concluye aseverando que “hoy, felizmente, hemos ganado y la prelatura ha perdido. Buscaremos similar resultado en Departamento de Propiedad Industrial, donde acudiremos en circunstancias distintas al pasado, pues ahora contamos con una sentencia favorable en una disputa por el dominio”.