«Sense8», serie de los Wachowski con marcada presencia LGTB, revoluciona las redes con las escenas de sexo gay de Miguel Ángel Silvestre

Sense8 es la serie de la que habla todo el mundo tras el estreno de su primera temporada en Netflix. Producida por los hermanos Andy y Lana Wachowski, el nuevo producto de ciencia ficción de los creadores de la mítica Matrix destaca por la presencia de personajes LGTB: al menos dos de sus ocho protagonistas (y sus relaciones). Uno de ellos está interpretado por el actor español Miguel Ángel Silvestre, que interpreta a Lito Rodríguez, un galán de telenovelas afincado en Ciudad de México… y homosexual en el armario.

La historia está protagonizada por ocho personajes de diferentes partes del mundo, que a partir de un determinado momento se sienten «conectados» mental y emocionalmente entre ellos pese a la distancia que los separa. De ahí su titulo, que juega con la palabra «sensate» («perceptivo, sensible») y la terminación «eight» («ocho»). Además del personaje que interpreta Miguel Ángel Silvestre, entre los ocho «conectados» hay un segundo personaje LGTB. Se trata de Nomi Marks, una mujer transexual y lesbiana. Un papel que por cierto interpreta la actriz y modelo Jamie Clayton, ella misma mujer transexual en la vida real.

La serie promete, y la representación de la diversidad LGTB parece garantizada en esta ocasión. No olvidemos, en este punto, que la propia Lana Wachowski salió del armario  como mujer trans hace varios años.

Os dejamos con el tráiler oficial que presenta a los personajes (Nomi, a partir del minuto 1:24, Lito a partir del 3:33). Aunque muy posiblemente muchos prefiráis ver imágenes más subiditas de tono que ya están disponibles en YouTube. Estas últimas horas han causado sensación en las redes algunas de estas imágenes, como la que insertamos debajo del vídeo, muy sugestivas de los atributos de Silvestre. Que no se diga que no estamos atentos a la actualidad… Y en cualquier caso, felicitamos a Silvestre, atractivo actor (y hasta donde sabemos, heterosexual) por su falta de complejos a la hora de interpretar este tipo de escenas.