Suecia: fracasa la “marcha del Orgullo” por un barrio de mayoría musulmana organizada por la derecha xenófoba
La extrema derecha europea vuelve a utilizar los derechos LGTB, que tradicionalmente ha denostado, como munición contra la población extranjera. La formación populista y antiinmigración Demócratas de Suecia (SD) organizó para este miércoles una marcha del Orgullo por las calles de los barrios de mayoría musulmana de Estocolmo. Las asociaciones LGTB se desmarcaron de lo que consideran una provocación xenófoba y que se ha saldado con un fracaso rotundo, al congregar apenas a una veintena de personas.
La iniciativa surgió de Jan Sjunnesson, antiguo redactor jefe de un periódico vinculado al SD. El Pride Järva tenía previsto discurrir por los distritos de Tensta, Rinkeby y Husby de la capital sueca, poblados mayoritariamente por personas de religión islámica. El texto de la convocatoria aseguraba que la “vestimenta es opcional” y animaba a los participantes a “aprovechar para broncear el vientre y las piernas”. “Quizás habrá una besada y canciones”, añadía.
Activistas de izquierdas y LGTB se opusieron desde el principio a la marcha, tachándola de provocación xenófoba. La consideran además innecesaria y contraproducente, al estar convocada apenas unos días antes del Orgullo LGTB de Estocolmo, que tendrá lugar este fin de semana, y al que se ha vetado la asistencia en calidad de representantes públicos a los miembros del SD. Finalmente, los manifestantes apenas superaron la veintena y los propios convocantes reconocieron que había más periodistas que participantes.
Los Demócratas de Suecia forman parte de una constelación de partidos europeos que comparten un discurso abiertamente xenófobo pero no se identifican con la extrema derecha clásica. En este grupo se podría incluir también a formaciones que han cosechado un relativo éxito electoral en sus países como el Partido Popular danés, el Frente Nacional (FN) francés o el FPÖ austriaco. Como analizábamos con motivo de las elecciones europeas del año pasado, la homofobia tradicionalmente exhibida por la derecha más radical pierde fuerza en los discursos de estos partidos: de hecho, no dudan en utilizarla como un argumento más contra la inmigración, su verdadero caballo de batalla.
Un buen ejemplo de este comportamiento es la presencia de dirigentes (abiertamente o no) homosexuales en el seno del UKIP británico o del FN; casi siempre defendiendo, eso sí, las posiciones contrarias al matrimonio igualitario de sus respectivas formaciones. El SD (que fue extraparlamentario hasta el año 2010 y viene experimentando un fuerte crecimiento desde entonces) se opone a la adopción homoparental y a lo que califica de “lobby gay”, pero no duda en erigirse en primer defensor de la igualdad LGTB supuestamente en peligro por la presencia de personas de origen extranjero en Suecia.
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Humming Albus
Periodista de pega por el compromiso con una causa. La información también es activismo, y por eso participo en dosmanzanas.
Pues yo iría a esa manifestación. No por provocar a los moros, sino por defender nuestros derechos. Los moros nunca han respetado a la comunidad LGTB. ¿Por que vamos nosotros a reapetarles a ellos? No tengo nada contra el Islam. Pero mientras los moros no respeten nuestros derechos; nosotros debemos manifestarnos en sus barrios y reivindicar nuestros derechos y nuestra libertad para amar libremente. Si nosotros respetamos su libertad religiosa, también debemos exigirles a ellos que respeten nuestra libertad sentimental. Sin duda, de estar en Suecia, habría ido a reivindicar mi libertad amorosa al pueblo moro
Bunny, tu comentario es directamente un insulto racista y, además, homófobo.
Racista porque tratas de forma homogénea (y prejuiciosa) a un pueblo que, primero, sólo tiene en común la religión (el resto de su cultura puede diferir enormemente), y segundo, es variadísimo y heterogéneo. Islam es la religión mayoritaria en lugares que están desde Kazajistán hasta Senegal, desde Marruecos hasta Indonesia, desde Bosnia hasta Chad. El islam no es sólo Arabia Saudí: hay países con mayoría musulmana en Europa (sí, Europa, y fíjate que digo «mayoría», no me refiero a nada relacionado con la inmigración), Asia (incluso en extremo oriente) y África. Y países con importantes minorías musulmanas los hay en todos los continentes. Así que a ver si dejamos de habalr de «los moros» como un todo homogéneo cuando son mil millones y medio de seres humanos.
Y sí, es homófobo. ¿Has pensado acaso en los musulmanes queer? ¿Acaso piensas que no hay? Porque yo conozco, y conozco unos cuantos y unas cuantas. Y no sólo se respetan, es que son personas en las que he visto un respeto a TODA la comunidad LGTB (no sólo a cisgays blancos machitos, sino también a trans, personas queers no blancas, asexuales y demás) que hace aprecer el «respeto» de las grandes asociaciones LLLGGGGGGGBt al propio colectivo como algo inexistente. ¿Y te atreves a insultar así a estas personas, que no sólo tienen que enfrentarse a la homo, lesbo, bi o transfobia sino también al racismo y a la islamofobia?
Alex, una cosa son los árabes, un pueblo que se extiende desde Arabia a Marruecos y otra los musulmanes. Un árabe puede no ser musulmán.
Quiero decir, una persona sea cual sea su origen tiene que ser respetada per se, da igual que sea árabe o europeo. Pero una religión o ideología, para mi forma de ver, tiene que ganarse ese respeto. Estoy en contra del islamismo al igual que lo puedo estar del cristianismo por la ideología machista, patriarcal y homófoba en la que se sustenta.
De acuerdo en que hay que apoyar a los que quieren modernizar el islam, pero no es menos importante apoyar a los que quieren apostatar, a los que quieren que se reduzca su influencia en sus sociedades… Por ejemplo a esos chicos marroquíes que encarcelaron por organizar una merienda protesta en el mes del ramadán. A los responsables de las organizaciones LGTB de países musulmanes que están todos en el exilio, (y en España, tenemos al responsable de la asociación LGTB marroquí). Y a tantas personas que luchan desde asociaciones de mujeres o de derechos humanos.
No comprendo que no se puedan hacer una manifestación por los derechos LGTB en un barrio de mayoría musulmana, invocando el respeto, o diciendo que es una provocación. Yo creo que sí se deben hacer, y además poner stands y dar charlas en sus institutos y cualquier otra iniciativa. Está claro que no son los de ese partido xenófobo los que deben hacerlo, pero los demás sí.
Resulta gracioso ver cómo estas estrategias tan burdas de la extrema derecha funcionan. Aquí tenemos a gais a los que si pudieran los extremistas de extrema derecha gasearían, y contra cuyos derechos actúan (ahí está lo de Finlandia, por ejemplo, donde esta gente va a forzar a discutir la derogación del matrimonio igualitario) hablando de los malos que son los inmigrantes y contribuyendo precisamente a reforzar las posiciones políticas y sociales de la extrema derecha.
A esta gente no solo se la sudan los derechos LGTB, además se ríen de ellos al utilizarlos para otros fines. Ninguna persona LGTB inteligente debería picar.
Es ofensivo que un partido homófono use nuestros derechos a favor de sus posiciones politicas, pero eso no debe dejar de lado que los islamistas son en su mayoría homófobos y están contra nosotros y eso deben abordarlo todos y no fingir que no pasa nada como están haciendo en este momento.