Activistas LGTB detenidos y acosados nuevamente en San Petersburgo solo por querer manifestarse públicamente
Nuevas detenciones en Rusia de activistas LGTB que únicamente intentaban manifestarse de forma pacífica. Ocurrió el pasado domingo en San Petersburgo, cuyas autoridades ya habían anunciado que no permitirían ninguno de los actos solicitados por los colectivos LGTB de la ciudad para estos días, entre ellos una marcha del Orgullo. Algunos de los activistas sufrieron además el intento de agresión de los participantes en la celebración del «Día del Paracaidista».
Los activistas LGTB ya habían solicitado permiso para manifestarse el 25 de julio, que fue denegado. Aún así, reiteraron la solicitud para convocar diversos actos públicos en los primeros días de agosto, entre ellos una marcha del Orgullo, que se celebraría el domingo pasado. El hecho de que se hubiera permitido la participación de una columna de activistas LGTB en la tradicional manifestación del 1 de mayo de este año, con la correspondiente protección policial, hacía aventurar un cambio de criterio de las autoridades. No fue así. El Comité de Derechos de San Petersburgo comunicó que no autorizaría ninguna de las convocatorias, dado que violarían la ley que prohíbe la propaganda de “relaciones sexuales no tradicionales” a menores. Las autoridades de San Petersburgo se unían así a las de Moscú, que han prohibido por décimo año consecutivo la celebración del Orgullo LGTB. Los activistas que persistieron en el empeño de manifestarse en Moscú fueron agredidos y posteriormente detenidos, entre ellos el conocido Nikolai Alekseev, que fue encarcelado durante 10 días y finalmente condenado a una fuerte sanción económica.
Como adelantábamos la semana pasada, ello no iba a frenar a los activistas. Yuri Gavrikov, uno de los convocantes, anunció que manifestarían aun sin el permiso correspondiente. Como forma de protesta, Gavrikov explicó que se reunirán en la Plaza del Palacio en la misma fecha que en ese lugar se celebra el Día del Paracaidista, una vieja tradición del ejército ruso. Una repetición de la actuación del activista Kirill Kalugin en el año 2013, que llevó a cabo una protesta en solitario en la misma fecha y lugar, siendo rodeado, acosado y agredido tanto por los miembros de las tropas paracaidistas presentes como por grupos de extremistas homófobos. Solo la intervención policial evitó que sufriera daños físicos, como se pudo comprobar en un vídeo que dio la vuelta al mundo, donde quedó patente tanto la valentía del activista como la cobardía del grupo de agresores (ataviados con una vestimenta que a muchos recordó los homoeróticos diseños de Jean Paul Gaultier).
Pues bien, escenas no muy diferentes pudieron verse el domingo. El siguiente vídeo de Ukraine Today muestra, además del momento en que varios de los activistas fueron detenidos y retirados del lugar en un furgón policial, como otros dos de ellos son increpados posteriormente por uno de los paracaidistas, que intenta agredirlos:
La valentía de ser LGTB visible en Rusia
Lo comentábamos también en nuesta anterior entrada. Meses después de la mencionada grabación, en el Día de Salir del Armario celebrado en octubre de 2013 Kirill Kalugin fue agredido y posteriormente detenido. El activista se ha visto obligado finalmente a abandonar Rusia, donde su integridad física corría peligro, encontrándose actualmente en Alemania, donde ha solicitado asilo.
Kalugin no es más que otra víctima más del ambiente de intensa homofobia social reinante en Rusia, donde es temible la práctica impunidad con que actúan grupos como Occupy Pedofilyaj y similares, dedicados al acoso, tortura e incluso asesinato de personas LGTB ante la pasividad muda de las autoridades. En vez de perseguir a quienes agreden y torturan, las autoridades alientan aún más la homofobia con leyes como la esgrimida por las autoridades de San Petersburgo, que fue aprobada en 2013, y prohíbe de hecho informar positivamente de la homosexualidad a menores, a la vez que permite que quienes simplemente enarbolan la bandera arcoíris o reivindican la celebración del Orgullo sean detenidos, sancionados o incluso encarcelados.