Cuatro meses de cárcel para dos de los responsables de la brutal agresión a una mujer transgénero en Fez
Cuatro meses de prisión y una multa de 500 dirhams (algo menos de 50 euros). Es la pena que un tribunal de Fez ha impuesto a dos de los jóvenes que hace pocas semanas intentaron linchar en esa misma ciudad marroquí a una joven tránsgenero, agresión cuyas terribles imágenes fueron captadas en una grabación que luego fue ampliamente divulgada.
El episodio al que hacemos referencia tuvo lugar el 29 de junio. La grabación de la agresión llegó al medio marroquí Goud, que la difundió, y terminó por convertirse en viral. En ella puede verse a la víctima intentando escapar de un taxi oscuro tras mantener una disputa con el conductor, que la insulta. Los agresores, todos ellos hombres jóvenes, prácticamente la sacan del vehículo y empiezan a agredirla brutalmente con puñetazos y golpes. La mujer acaba en el suelo, mientras los agresores la patean, hasta que parece quedar semiinconsciente. De repente saca fuerzas de flaqueza, consigue ponerse de pie y corre despavorida, mientras la turba la persigue. Afortunadamente, tras un instante de gran angustia, acaba por refugiarse en un mercado donde un policía hace valer su autoridad. La mujer pudo ser finalmente evacuada en un coche de policía al que los agresores continuaron arrojando botellas.
Una agresión que tenía lugar en un contexto en el que, como hemos venido informando en los últimos meses, parece producirse un recrudecimiento de la persecución LGTBfoba por parte de las autoridades de Marruecos, que antes solían mirar hacia otro lado pese a la existencia de leyes que criminalizan, por ejemplo, las relaciones entre personas del mismo sexo. El propio ministro de Justicia marroquí, Mustafá Ramid, llegó a insinuar, en referencia al ataque de Fez, que las personas LGTB son culpables de las agresiones que reciben.
Por fortuna, la difusión del vídeo y la ola de indignación que despertó entre los defensores de los derechos humanos del propio Marruecos activó a las fuerzas del orden marroquíes, que acabaron por identificar y detener a dos de los agresores, ahora condenados cuatro meses de cárcel y una multa. Condena que en cualquier caso se nos antoja bastante suave por una agresión tan brutal, y que contrasta con las penas que se imponen a las propias personas LGTB. En junio recogíamos, por ejemplo, como dos hombres detenidos simplemente por besarse, fotografiarse y mostrar gestos mutuos de afecto se enfrentaban a hasta tres años de prisión. Finalmente fueron condenados a cuatro meses… el mismo periodo que los dos salvajes que agredieron a la chica, que según Mustafá Jebbour, de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos, se encuentra en estado de shock y necesita ayuda psicológica.