Un joven gay británico es brutalmente agredido en plena calle en Sitges
Grave agresión de carácter homófobo la ocurrida en Sitges en la madrugada del pasado sábado 1 de agosto. Mark Small, un joven británico que se encontraba de vacaciones en España, fue golpeado brutalmente por otro chico «de unos 25 años de edad» cuando se dirigía a la estación de tren de la localidad barcelonesa, después de una noche de fiesta. En una declaraciones concedidas a dosmanzanas, el joven relata lo ocurrido aquella noche.
El suceso tuvo lugar alrededor de las tres de la madrugada del viernes al sábado. La víctima, un conocido transformista de la ciudad de Londres, se encontraba de fiesta en un local de ambiente de la zona. A esa hora, una amiga y él decidieron abandonar el pub y dirigirse a la estación de tren para coger un taxi de vuelta a casa. Por el camino, ambos iban cogidos de la mano a la vez que entablaban conversación con otras personas que había en la calle en ese momento, “algo típico que una persona podría hacer cuando sale por la noche y está de vacaciones”, recuerda el joven.
“Todo el mundo estaba muy feliz, hasta que me acerqué a un chico que estaba con una chica y con uno o dos chicos más. Él me miró de forma extraña después de que yo le dijese ‘hola’ y lo siguiente que recuerdo son sus manos dirigiéndose hacia mi cabeza y después que me estaba levantando del suelo cubierto de sangre”, señala Small, conocido artísticamente como Vanity Nightmare, que decidió compartir una imagen de lo ocurrido en su perfil de la red social Instagram.
Lo sorprendente es que nadie se acercó a socorrer a Small tras la brutal paliza. “En ese momento había bastante gente por allí, así que sé que otros vieron el ataque. No recuerdo que nadie viniera a preguntarme si yo estaba bien, ya que yo estaba bastante perturbado por haber sido atacado”, recuerda. El joven fue trasladado a un hospital y allí se dio cuenta de que, entre otras cosas, había perdido un diente y tenía la nariz prácticamente rota.
Small intenta ahora recuperarse de las heridas provocadas por la agresión. “Aún tengo la cara hinchada, moratones por toda la nariz y un ojo negro. También tengo un diente astillado, pero aparte de eso estoy bien. Podría haber sido mucho peor. Mentalmente, no me siento yo mismo en este momento. Estoy un poco nervioso”, dice.
«Me sorprendió que no registrasen el ataque»
Small asegura que había varios Mossos d”Esquadra “a solo unos metros” del lugar de la agresión, aunque no le consta que llegaran a presenciar lo ocurrido. Eso sí, al verle, se limitaron a preguntarle si estaba bien y si necesitaba que llamasen a una ambulancia. “Aparte de eso, no me preguntaron realmente mucho más ni parecían muy preocupados. Me sorprendió que no registrasen el ataque”, comenta el joven.
“No he presentado ninguna denuncia ante la policía, ya que no sabría cómo hacerlo. Nunca me ha pasado algo así antes y me habría gustado tener más ayuda sobre cómo proceder en un caso así”, añade Small. De hecho, la víctima asegura que nunca antes había sufrido un ataque físico, aunque sí había experimentado ataques verbales en varias ocasiones.
Esta era la segunda vez que Small visitaba España. “La primera visita tuvo lugar tan solo un par de semanas atrás, cuando fui a Gran Canaria. Durante los días que pasé allí no tuve ningún problema en absoluto. No recuerdo haber visto a ningún policía por la calle allí, pero me he dado cuenta de que hay bastantes en las calles de Sitges, lo que me desconcierta y me lleva a preguntarme por qué hay tantos allí”. Sin duda, sorprende que aún hoy tengamos que dar cuenta de este tipo de episodios, más aún si cabe en un destino ‘gay-friendly’ como es Sitges.
En primer lugar, esto no es un ataque homófobo, pues el chico iba cogido de la mano de una chica, y en ningún caso se le atacó por ser gay, simplemente estamos ante una agresión, como tantas otras existen. Poner en duda el carácter gay de Sitges por un episodio aislado y repito, para nada homófobo demuestra poca profesionalidad por vuestra parte, o algún interés oculto en desprestigiar este pueblo Catalan, que siempre ha sido gay, incluso cuando Franco.
No sé, raro es que esto se produzca en Sitges
Increíble, intolerable, inadmisible, hay que pedir a la policía que explique que ha hecho al respecto, y exigir responsabilidades en caso de que no hayan abierto diligencias como mínimo.
Hay que ser del género tonto para afirmar que la agresión no fue homofoba porque el chico iba de la mano de su amiga, o no tener ni idea de lo que la gente, incluidos los gays, hace. Seguramente se le notaba a la lengua que es gay, y más aún, el no lo dice, pero seguramente intento algo con el «machote » (?) que lo agredio.
De la descripción que se da de los hechos no se puede deducir que haya sido una agresión homófoba. Todas las agresiones en las que la víctima es gay no tienen por que serlo. Recurrir siempre, cuando no es cierto, a que nos atacan por ser gays no ayuda en nada al colectivo ni a nuestras reivindicaciones.
Por otro lado, sólo conocemos la versión de los hechos de una de las partes y ni siquiera hay testimonio de ningún testigo. Debemos creernos que la otra persona le atacó sin más? (no digo que no sea así pero no lo sabemos)
Y los comentarios de la gente ya son para mear y no echar gota. Que se escriba sobre una agresión, homófoba o no, ocurrida en Sitges no es para pensar que hay una conspiración contra el municipio. Cómo nos gusta exagerar. Y por otro lado, pedir responsabilidades a la policía por no abrir diligencias? Si no ha habido denuncia alguna por parte de la víctima…
Yo voy a contar mi experiencia en dicha localidad, fui hace dos años invitado a dicha localidad me lo pase muy bien porque pude vivir muy libremente pero tambien tengo que decir que es el único sitio donde he sido vicitima de homofobia, la primera vez en un hotel donde a mi y al chico que me invito un camarero que nos servia la comida de una forma bastante cruel nos hizo saber que eramos unos degenerados y la segunda vez el día que regresaba a mí casa mientras me dirigia a la estación de ferrocarril un hombre me llamo maricon de mierda, sinceramente las dos veces fue algo muy desagradable.
El primer mensaje es claramente un ejemplo de matar al mensajero. Veamos, la noticia narra los hechos y califica la agresión muy plausiblemente de homófoba,
Siento que te duela que sea en Sitges. Pero los hechos son los que son. Las agresiones homofobas pueden pasar hasta en el Castro.
Alguno ha calificado el comentario de género tonto. Yo lo califico de género paranoide. Más que nada por la salida de tiesto de atribuir intencionalidades ocultas de querer desprestigiar a un «pueblo catalán gay friendly desde los tiempos» de Franco». Sí claro, darling, y a dosmanzanas le ha pagado el PP… (por cierto, cariño, yo soy de Gran Canaria y también éramos gay friendly en tiempos de Franco, pero no tenemos el ego tan subido como para hacernos las víctimas si alguien cuenta algo malo que pasa en nuestra tierra).
Hace tiempo que se oye hablar de sucesos homofobicos en Sitges, no es nada nuevo.
Hace unos años el alcalde enviaba a la policia a hacer fichas a los gays que iban a las zonas de cruising y armo mucho revuelo.Poco despues se hizo una marcha del orgullo y fue gente a protestar por lo sucedido y los participantes de la marcha fueron increpados por habitantes del pueblo e incluso les lanzaron objetos si no recuerdo mal.
Primero de todo releyendo mi comentario corregiría algunas cosas. Evidentemente que en Sitges hay ataques homófobos, como los hay en Ibiza, Madrid, Barcelona o en cualquier lugar. Desgraciadamente es así. Por lo del ego, en absoluto, yo soy de Alicante y llevo toda la vida veraneando en Sitges, jamás he tenido problema ni he presenciado alguno. Que los hay, sí, pero poner en duda la tolerancia de ese pueblo me parece injusto. Y permitidme que dude cuando se afirma que nadie se preocupó por el estado de este chico. Sin poner en entredicho su testimonio, creo que faltan testigos.