La Asociación de Transexuales de Andalucía exige la retirada del concordato con la Iglesia católica
ATA-Sylvia Rivera no pide caridad ni compasión para “lavar la cara” a una institución que se destaca por su misoginia y lgtbifobia, exigimos el cumplimiento y respeto a las leyes civiles y constitucionales que amparan a la ciudadanía.
Ante las declaraciones hechas por el obispo de Cádiz y Ceuta en las que de nuevo, bajo pretexto de un dogma moral, justifica la negación de ser padrino a Álex Salinas, declaraciones publicadas en la web de la diócesis de Cádiz y Ceuta, esta asociación exige la retirada del concordato con la Iglesia católica, para poner fin al privilegio fiscal e impunidad ante reiteradas actuaciones y declaraciones que incitan al odio y menoscaban los derechos civiles.
Así mismo, le recordamos a la Fiscalía de Igualdad y contra los delitos de odios de Cádiz la petición realizada por nuestra entidad con fecha 31 de julio para que interviniera en este caso por si fuera constitutivo de delito ya que consideramos que es un acto de transfobia.
“La libertad religiosa no puede entrar en conflicto con los Derechos Humanos”, ha declarado Mar Cambrollé, presidenta de la Asociación de Transexuales de Andalucía, quien añade que “la Iglesia debe ser responsable de sus reiteradas prácticas lgtbfóbicas que incitan al odio y al menoscabo de derechos y por tanto, el Estado de Derecho debe proteger a las personas que son victimas de estas prácticas”.
Ante el aumento de delitos y violencia hacia las personas lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, ATA-Sylvia Rivera insiste en la necesidad de una ley autonómica como la catalana y la extremeña, que proteja y sancione los delitos de odio, así como una ley estatal de transexualidad que unifique criterios y garantice derechos por igual a todas las personas transexuales del Estado español, teniendo como referente la ley de Andalucía.