Detenidos 11 hombres en Senegal por participar en actos homosexuales
La policía de la ciudad de Kaolack ha detenido a 11 hombres acusados de participar en actos homosexuales. De confirmarse los cargos, los detenidos se enfrentarían a penas de hasta cinco años de prisión, en un país en el que este mismo año se han dado a conocer varios casos de condenas firmes por delitos “contra natura”.
Según un testigo del arresto, que se ha identificado como Boukhari Ndiaye, los detenidos habrían formado parte de un grupo de 20 jóvenes que participaban en una ceremonia ritual de boda entre dos hombres. El festejo habría tenido lugar el pasado viernes 25, en un colegio de Kaolack, una localidad del sudeste de la nación, a 200 kilómetros de Dakar.
Tras la detención, los once jóvenes, de unos veinte años de edad, fueron conducidos a la comisaría de Kaolack, donde aún permanecían detenidos a la fecha en que Ndiaye expuso su testimonio.
De confirmarse los cargos y pasar a disposición judicial, los detenidos se enfrentarían a penas de prisión de hasta cinco años, y a una fuerte sanción económica. Este mismo año hemos podido conocer la condena a seis meses de cárcel de un periodista, acusado de “actos contra natura”. Idéntica acusación se formuló contra otros siete hombres por mantener relaciones homosexuales, coincidiendo también la duración de la condena.
Senegal: penas de hasta cinco años de cárcel por homosexualidad
Como adelantábamos, Senegal, un país de África occidental de mayoría musulmana, castiga las relaciones homosexuales con hasta cinco años de cárcel y multas que en los casos más extremos pueden llegar hasta los 1.500 euros (unos 1.650 dólares), cifra exorbitante para un ciudadano senegalés. Ya en 2010 nos hacíamos eco de un informe de Human Rights Watch que alertaba del incremento de las agresiones hacia las personas homosexuales en ese país, estimuladas por líderes políticos y religiosos que habrían sido decisivos a la hora de fabricar un clima de violencia homófoba con la connivencia de buena parte de los medios de comunicación.
En abril de 2013, la jefatura del Estado senegalés emitió un comunicado en el que declaraba que “los valores culturales básicos enraizados [en Senegal] no pueden ser compatibles con la opción de despenalizar la homosexualidad”, afirmando con firmeza que “el Estado no ha considerado esa opción, que se excluye por completo de su doctrina política”. Esta misma declaración fue reiterada por el presidente Macky Sall dos meses más tarde, durante la visita que efectuó al país africano Barack Obama. Incluso quienes defendieron la despenalización en el pasado, como el expresidente honorario de la Federación Internacional de Derechos Humanos Sidiki Kaba, desistió de su intención al convertirse en ministro de Justicia de Senegal.
Muchas de las agresiones, detenciones e incluso linchamientos ni siquiera llegarían a las páginas de la prensa internacional. El hostigamiento también alcanza a las mujeres lesbianas o percibidas como tales, como recogimos por ejemplo en septiembre de 2013. Entonces, por suerte, cuatro de las cinco detenidas fueron puestas en libertad. En febrero de 2014, una pareja de hombres fue condenada a seis meses de prisión, denunciada por sus propios vecinos. Como referíamos anteriormente, también nos hemos hecho eco del caso del periodista Tamsir Jupiter Ndiaye, condenado por segunda vez a la cárcel a principios del mes de agosto de 2015, después de que un joven lo acusara de intentar violarlo. También reseñamos que en julio de 2015 se sentenció a seis meses de cárcel a siete jóvenes, declarados culpables de un delito de actos “contra natura”, a pesar de que no se aportaron pruebas materiales ni testimonios que probaran las acusaciones.