Los obispos italianos impiden la proyección de «Weekend» en la mayor parte de Italia
La jerarquía católica vuelve a hacer notar su influencia en Italia. En esta ocasión, obstaculizando la proyección de la película Weekend. Estrenada en Alemania o Reino Unido en 2011, el aclamado largometraje de Andrew Haigh se estrenó en Italia el pasado 10 de marzo, con más de cinco años de retraso. Sin embargo, apenas podrá verse en las salas.
El motivo de esta limitación está en que la Iglesia católica posee más de 1.100 salas de cine en Italia (algunas de ellas integradas en el «circuito de calidad», de gestión laica pero que deben seguir los criterios eclesiásticos), y ha prohibido que en ellas se proyecte la película. Según el comité de evaluación de películas de la Conferencia Episcopal Italiana, Weekend ha sido clasificada como “no recomendada, no aprovechable y escabrosa”, debido a que toca los temas del consumo de drogas y la homosexualidad.
Como consecuencia, Weekend apenas se proyecta en diez cines de todo el país, y ciudades del peso de Florencia, Bérgamo o Padua no tienen ninguna sala en que pueda verse la película. En palabras de Francesco Zaffarano, en La Stampa: “No es censura, pero se le acerca mucho. La Comisión de la Conferencia Episcopal Italiana evalúa todas las películas que salen en Italia para las 1.126 Salas de la Comunidad, esto es, eclesiásticas”.
Cesare Petrillo, responsable de la distribuidora de Weekend en Italia, Theodora Films, ha afirmado que «Weekend no tiene nada de escandaloso, es una historia de amor«, y ha invitado a que se vea la película antes de juzgarla, esperando que un buen resultado haga que en la segunda semana de proyección se difunda en más salas: “Invitamos a los espectadores a ver la película en el primer fin de semana: como esperamos todos, una media alta podrá permitir una distribución más amplia en la segunda semana de programación”.
Por lo demás, no resulta, de entrada, muy convincente el argumento de que exhibe el consumo de drogas; merecería la pena comprobar si otras películas con similar exhibición de consumo (o mayor) son igualmente vetadas en prácticamente todos los cines de Italia.
En definitiva, no solo un episodio triste con una película tan aclamada como Weekend. Es también un signo del fuerte peso de la Conferencia Episcopal Italiana; y sobre todo, no parece encajar demasiado, como mínimo, con los cambios siquiera formales del pontificado de Francisco.
No podemos sino terminar esta entrada homenajeando la que sin duda es una de las películas de temática gay mas importantes de la última década. «Una verdadera joya, simplemente perfecta, romántica, exquisita, y muy comprometida: una mezcla entre 9 songs y Notting Hill (si eso es posible). Una historia tan reconocible que duele: vivimos en un mundo heterosexista y resulta complicado y frustrante explicar que nos hemos enamorado de un tío al que solo hemos visto unas horas. Que nuestro mundo puede cambiar en un momento y que sin embargo hay trenes que solo pasan una vez…» escribía en 2011 en Desayuno en Urano el putojacktwist. Os dejamos con su tráiler:
Y todavía hay gays católicos………
Triste y lamentable. Es una preciosa película; de las mejores que he visto de temática gay. Yo ni siquiera me había planteado el tema de las drogas. Hay otras cintas realmente fuertes en este sentido y no se vetan. Lo de Italia es realmente subrealista.
¿Que no es censura? ¿Entonces censura sería una quema pública de la película? Menudas memeces que escribe alguna gente, por favor.