Expertos advierten: los insultos por LGTBfobia quedan fuera del código de conducta pactado por la Comisión Europea con Facebook o Twitter
La Comisión Europea, tras llegar a un acuerdo con varias de las más importantes empresas dedicadas a las tecnologías de la información, hizo público el pasado martes un ‘Código de conducta’ que incluye una serie de compromisos para luchar contra la propagación de la incitación ilegal al odio en Europa a través de la red. Sin embargo, los expertos advierten que las proclamas homófobas o tránsfobas quedan fuera de dicho código.
Con el fin de evitar la propagación de la incitación ilegal al odio, Facebook, Twitter, YouTube y Microsoft acordaron con la Unión Europea borrar en menos de 24 horas todos aquellos mensajes que inciten al racismo o la xenofobia. Además, y entre otras cosas, estas empresas educarán y sensibilizarán a sus usuarios sobre los tipos de contenidos no autorizados en virtud de sus normas y directrices comunitarias.
“Los recientes atentados terroristas nos han recordado la urgente necesidad de hacer frente a la incitación ilegal al odio en Internet. […] Este acuerdo constituye un importante paso adelante importante para garantizar que Internet siga siendo un lugar de expresión libre y democrática en el que las normas y los valores europeos se respeten”, aseguraba Vĕra Jourová, comisaria europea de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género.
No obstante, los ataques al colectivo LGTB quedan fuera de ese código de odio, al menos de forma explícita. Algo bastante llamativo teniendo en cuenta que, solo en España, casi el 13% de los delitos de odio cometidos el pasado año lo fueron por orientación sexual o identidad de género. En total, y solo en 2015, se registraron 168 casos de ataques debido a la LGTBfobia, que por otra parte según los expertos constituyen solo la punta del iceberg. Y la red parece ser un caldo de cultivo ideal para la expansión del odio por LGTBfobia. Por ejemplo, según un reciente estudio dado a conocer por el colectivo madrileño COGAM, el 15% del alumnado LGTB padece ciberacoso, especialmente el alumnado trans. Más del 52% de los alumnos, de hecho, ha sido testigo de este tipo de acoso.
Para Alexander Brown, profesor de Teoría Social y Política Contemporánea de la Universidad británica de East Anglia, el acuerdo es necesario pero resulta incompleto al no incluir al colectivo LGTB. «Este nuevo acuerdo sólo cubre la incitación al odio ilegal según lo definido por la Decisión marco 2008/913/JAI del Consejo, de 28 de noviembre de 2008, relativa a la lucha contra determinadas formas y manifestaciones de racismo y xenofobia mediante el Derecho penal. Y solo se refiere a la ‘raza, color, religión, ascendencia o el origen nacional o étnico. Eso deja fuera, entre otros, a homosexuales, discapacitados, transexuales, y mujeres. Paradójicamente, las normas actuales de la comunidad publicadas en las páginas web de Facebook y YouTube incluyen ambas explícitamente a estos otros grupos a la hora de definir las ‘expresiones de odio’”, señala.
En un país justo y progresivo, cualquier tipo de discurso de odio contra la comunidad LGBTI+ debería ser considerada propaganda y penada por ley. Ya no se puede seguir tolerando, no en 2016. Cualquier persona que lo haga debe ser considerada un potencial peligro para la sociedad, en particular para esta comunidad.