Un soldado chileno denuncia a compañeros y superiores por constantes acosos homófobos
El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual de Chile (MOVILH) ha hecho pública la denuncia de un militar con dos años de servicio en el Regimiento Brigada Acorazada La Concepción (radicado en Antofagasta, al norte del país). Debido a su forma de hablar y actuar, el soldado se lamenta de que sus compañeros y superiores le tiran besos, le silban y constantemente le dicen frases del tipo “córtate las uñas, maricón culiao”, “no se junten con él porque es hueco y le gusta la tula”, “caballo” o “no eres persona”, entre otros.
El afectado lleva tiempo queriendo formalizar internamente la queja por las continuas agresiones verbales y burlas homófobas que padece, pero sus superiores se lo han impedido hasta ahora. Harto de esta situación de hostigamiento, el militar ha recurrido al MOVILH. Esta organización LGTB, a su vez, ha trasladado la denuncia al comandante en jefe del Ejército, Humberto Oviedo Arriagada, solicitando su inmediata intervención.
Rolando Jiménez, activista del MOVILH, ha explicado que, “producto de los hostigamientos, el soldado vio muy afectada su estabilidad emocional, por lo que debió recurrir a profesionales de la psicología y la psiquiatría que le han dado variadas licencias médicas”.
Por todo ello, el MOVILH ha pedido a Oviedo Arriagada que instruya en breve una investigación sobre lo ocurrido, que garantice los derechos del denunciante y que sancione a los responsables de los abusos, ya que “violentan la Ley Zamudio y los propios reglamentos de las Fuerzas Armadas”.
Tras la carta enviada por la entidad igualitaria chilena al comandante en jefe del Ejército, fue el propio comandante en jefe de la I División, Sergio Retamal, quien ha tomado contacto directo con el afectado para recopilar mayores antecedentes y determinar eventuales responsabilidades y sus correspondientes medidas administrativas.
“Esperamos justicia para el soldado que hoy es víctima de la homofobia, en manos de unos pares que no conocen nada de la dignidad humana y del respeto que deben a nuestra legislación”, han concluido desde el MOVILH.