Celebrado el Orgullo de Montenegro con el apoyo de miembros del Gobierno
Este 17 de diciembre se celebró el Orgullo de Montenegro, en el que docenas de personas, arropadas por un fuerte dispositivo policial, exhibieron pancartas que reclamaban la igualdad. A diferencia de otros años, en los que se tuvieron que lamentar incidentes violentos, en este Orgullo se unieron a la manifestación los ministros de Cultura y de Derechos Humanos. El Gobierno montenegrino, alentado por el deseo de integrarse en la Unión Europea, ha prometido avances en los derechos LGTB, como la regulación de las uniones civiles.
Por las calles de Podgorica, la capital de Montenegro, desfilaron el pasado sábado 17 decenas de personas para celebrar el Orgullo LGTB. En previsión de posibles ataques de sectores LGTBfobos, la manifestación se acompañó de un fuerte dispositivo policial, compuesto por centenares de agentes. A la marcha se unieron representantes del Gobierno montenegrino, como el ministro de Cultura, Janko Ljumović, y el ministro de Derechos Humanos, Mehmet Zenka. También se recibió el apoyo del representante de la Unión Europea en Montenegro, Aivo Orav, o de la embajada británica.
Los manifestantes portaban pancartas con lemas como “Born this way” o “Igualdad para todos”. Una de las reclamaciones de los convocantes, Queer Montenegro, era la legislación del matrimonio igualitario por parte del Gobierno —algo que necesitaría una reforma constitucional—, así como buscar el apoyo de las familias de las personas LGTB. En palabras de Danijel Kalezić, miembro del comité organizador, “con este Orgullo, buscamos el apoyo de aquellos que más nos importan, nuestros padres, madres, hermanos, hermanas y demás parientes. Su apoyo se echa en falta cuando descubren que eres gay”.
Efectivamente, la sociedad montenegrina es fuertemente LGTBfoba, como señalaba una encuesta en la que el 71 % de los participantes creía que la homosexualidad es una enfermedad, y el 58 % consideraba que es “muy peligrosa” para la sociedad.
Indudablemente, la promoción de iniciativas legislativas favorables a los derechos LGTB puede servir para combatir tantos prejuicios. Alentado por su deseo de integrarse en la Unión Europea, el Gobierno de Montenegro ha prometido algunos avances más de los ya realizados, entre ellos el reconocimiento de las parejas del mismo sexo, con un proyecto de ley de uniones civiles.
Es de esperar que el desarrollo pacífico de este Orgullo de 2016 sea señal de una definitiva normalización. Lamentablemente, en el primer Orgullo de Podgorica, que se celebró en 2013, los manifestantes tuvieron que sufrir los ataques de los miembros de una contramanifestación LGTBfoba, que se enfrentaron directamente a las fuerzas del orden que protegían la marcha haciendo uso de piedras y artefactos incendiarios y cometiendo actos vandálicos en el centro de la ciudad. En 2014, finalmente pudo celebrarse sin incidentes, aunque tuvo que ser aplazado durante meses por motivos de seguridad y el dispositivo policial que se dispuso fue extraordinario.
Bajo la lupa de la Unión Europea en materia de discriminación
Montenegro cuenta con una población que no alcanza los 700.000 habitantes. Alrededor del 43 % son montenegrinos, mientras que un 32% son serbios. Hay además diversas minorías, sobre todo bosnios y albaneses. Tras la traumática desmembración de Yugoslavia, la República de Montenegro permaneció unos años federada con Serbia, hasta que en 2006 un referéndum decidió su independencia total, de forma pacífica.
Las relaciones homosexuales en Montenegro fueron despenalizadas en 1977, siendo la edad de consentimiento la misma que la de las relaciones heterosexuales. No hay reconocimiento legal de las parejas del mismo sexo, y de hecho su Constitución restringe el derecho a contraer matrimonio a las parejas heterosexuales. En julio de 2010, por exigencia de la Unión Europea (a la que Montenegro aspira a unirse) la Cámara del país aprobó una normativa antidiscriminatoria que incluye la orientación sexual y la identidad de género como condiciones cuya discriminación queda prohibida, pero en abril de 2012 el Parlamento Europeo reclamaba más esfuerzos a Montenegro en materia de derechos LGTB.