La Comunidad de Madrid multa con 1.000 euros al director del colegio que comparó la ley madrileña contra la LGTBfobia con el fanatismo terrorista
Al inicio del curso escolar, el director del colegio concertado Juan Pablo II de Alcorcón dirigió una carta de bienvenida a los alumnos en la que expresaba su rechazo hacia la ley madrileña contra la LGTBfobia, que comparaba con el “fanatismo terrorista”. Tras la denuncia presentada por el colectivo LGTB Arcópoli, la Consejería de Políticas Sociales ha establecido una multa de 1.000 euros para Carlos Martínez, que todavía dispone de la posibilidad de recurrir la sanción. Se trata del primer caso en el que se aplica la citada legislación desde que se aprobara el pasado verano. Arcópoli se felicita por esta resolución y se ofrece a dar charlas de diversidad sexual y de género en el centro educativo, ubicado en Alcorcón, pero exige a Carlos Martínez que se disculpe.
Como recogía dosmanzanas en su momento, el pasado 9 de septiembre el director del centro educativo Juan Pablo II de Alcorcón, Carlos Martínez, dirigía a los alumnos y a sus familias una carta de bienvenida al curso escolar en la que expresaba su preocupación, en tanto que, según su opinión, “los atentados terroristas llegan a nuestras puertas, mientras que nuestros políticos parece que se entretienen en generar problemas inexistentes y complicar las cosas”. Martínez, además, en referencia a la ley que la Asamblea de Madrid impulsó contra la LGTBfobia aseguraba que su “parecido con el fanatismo terrorista es inquietante”.
Sin embargo, en aplicación de esa misma ley que denostaba, Carlos Martínez tendrá que pagar una multa de 1.000 euros, impuesta por la Consejería de Políticas Sociales (en último término, cabe la posibilidad de que sea recurrida). Desde el colectivo Arcópoli han querido mostrar su “satisfacción por la primera sanción de este tipo en la historia y en la Comunidad de Madrid”. Con todo, consideran que el hecho de multar “con miles de euros a la celebración del Orgullo y a fomentar el odio solo se imponga una sanción leve, es decepcionante”. Asimismo, Arcópoli exige al responsable del colegio que pida disculpas por sus palabras hirientes y se ofrece a dar charlas de diversidad sexual y de género en el centro.
La ley madrileña, entre muchas otras medidas contra la discriminación de las personas LGTBI, obliga a los centros educativos a abordar en las aulas la diversidad sexual y de género, apartado que es el que ha despertado las iras tanto de los obispos como del director del Juan Pablo II. En cuanto al capítulo sancionador, que también es referenciado en la “carta de bienvenida”, las multas podrán llegar, en los casos muy graves, hasta los 45.000 euros, y además podrá imponerse la prohibición de acceder a cualquier tipo de ayuda pública de la Comunidad de Madrid por un periodo de hasta tres años, la inhabilitación temporal por un periodo de hasta tres años para ser titular de centros o servicios dedicados a la prestación de servicios públicos.
Silencio del alcalde de Alcorcón
David Pérez, alcalde de Alcorcón, se negó en su momento a recriminar la LGTBfóbica carta del director del colegio Juan Pablo II o a tomar medida alguna a este respecto. Por ello, Arcópoli desea que el primer regidor “se posicione ahora a favor de la igualdad y en contra del odio. Si por desgracia se vuelve a posicionar en contra de la igualdad, rogamos a los partidos de la oposición que tomen las medidas que sean necesarias para evitar que el Ayuntamiento siga bloqueando cualquier medida por la igualdad LGTB”.
Cabe recordar que David Pérez, también diputado del PP en la Asamblea de Madrid, fue uno de los dos ausentes durante la votación de la ley contra la LGTBfobia (aprobada por la unanimidad de los grupos parlamentarios). El propio Pérez, incluso, amenazó al colectivo Arcópoli con una demanda tras sus críticas por los reiterados incumplimientos del Gobierno local en materia LGTB, que concluyeron con la reprobación del alcalde por el pleno municipal.
Así lo explicaba Arcópoli: “en febrero se aprobó una iniciativa de Ciudadanos con la abstención del grupo Popular, en mayo el grupo Socialista presentó una moción para que con motivo del Orgullo LGTB la Corporación Municipal colgara la bandera arcoíris en la fachada del Ayuntamiento y, a pesar de ser aprobada, la iniciativa fue vetada por el alcalde. La concejal de Igualdad Susana Mozo (PP) afirmó que ’no se puede ser tolerante con los intolerantes [refiriéndose al Colectivo LGTB]’. En junio el grupo Ganar Alcorcón presentó otra moción para trabajar con el colectivo LGTB, y el grupo Municipal Popular nuevamente votó en contra. Todas las mociones fueron aprobadas, debido a la minoría del Grupo Popular en el Consistorio, pero el Equipo de Gobierno se niega a ejecutarlas”.