Australia: diputados conservadores exigen la aprobación del matrimonio igualitario por la vía parlamentaria
Tras unas semanas de relativa calma, se reactiva el debate sobre la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo en Australia. El primer ministro Malcolm Turnbull, partidario de celebrar un referéndum, se enfrenta a la rebelión de un grupo de diputados de su propio partido, que exigen una votación parlamentaria libre de disciplinas de partido. Mientras, los activistas han encontrado una forma original de hacer campaña por la igualdad.
Continúa la incertidumbre en el interminable debate sobre el matrimonio igualitario en Australia. Tras la negativa de la oposición laborista a apoyar la convocatoria de un referéndum como quiere el primer ministro, ahora es un grupo de sus propios diputados el que se rebela contra los planes de Turnbull. Su objetivo es que una vez que pase la fecha prevista inicialmente para la consulta (el 11 de febrero) sin que esta se haya celebrado, los liberal-conservadores revisen su postura y permitan un voto libre en el Parlamento sobre el asunto.
En una situación de bloqueo como la actual, en la que la oposición rechaza el referéndum por innecesario y divisivo, los críticos reclaman que el Partido Liberal deje de ser una barrera para la igualdad matrimonial. Pero los sectores más conservadores de la formación no piensan ceder fácilmente. El ex primer ministro Tony Abbott ha instado a su sucesor a mantener su promesa de campaña y no cambiar la ley sin antes celebrar un referéndum. Otros diputados de este sector inmovilista se han sumado a su petición de “no traicionar a los votantes” e intentar convencer a los laboristas de que la consulta es la mejor solución.
La oposición, sin embargo, insiste en reclamar una votación libre de disciplinas de partido en el Parlamento para aprobar por fin la medida, toda vez que existe una mayoría clara de diputados y senadores favorables a la misma. “Qué ‘traición’ tan justa y sensata sería, primer ministro”, tuiteaba el senador Derryn Hinch. El líder laborista, Bill Shorten, opina que “no hay razones para retrasar” la decisión que debe tomar Turnbull. El primer ministro llegó a amenazar con dejar el asunto en vía muerta en lo que queda de legislatura.
Los activistas inician una campaña de envío de faxes
Mientras continúa el agotador debate político, los miembros de Equality Campaign han lanzado una campaña de envío de faxes a los diputados para pedirles que apoyen una votación parlamentaria libre sobre el matrimonio igualitario. Los activistas han elegido este formato para incrementar la implicación de los destinatarios con las historias que les van a hacer llegar y porque se da el caso de que cada diputado cuenta con un equipo de fax, cuyos números son públicos. Desde Equality Campaign piensan que esta táctica será más efectiva para concienciar a los legisladores más recalcitrantes e intentar hacerlos cambiar de opinión, que la de enviar grandes cantidades de correos electrónicos. Y es que no sería la primera vez que un político cambia de posición sobre esta cuestión al conocer una historia personal. Veremos si es suficiente.