El diario «ABC» difunde la campaña de odio de HazteOír
Escalada de la campaña de odio orquestada por HazteOír. Este domingo, el diario ABC, una de las principales cabeceras de la prensa escrita española, difunde junto a su periódico el panfleto LGTBfobo editado por esta organización ultraconservadora, junto a un manifiesto «por la libertad de expresión» que HazteOír pide firmar y devolver por correo. Curiosamente, la difusión del contenido tránsfobo coincide en ABC con una impactante portada mostrando a diversas personalidades sociales y políticas contando que ellas van a misa todos los domingos.
El panfleto que ABC difunde es el mismo que HazteOír hizo llegar hace unos meses a cientos de colegios de toda España. En él, se denigran los avances legislativos que se están produciendo en diferentes comunidades autónomas en materia LGTB, en particular en el ámbito educativo y se recopila todo un argumentario ultra en contra de la diversidad sexual, y muy especialmente en contra de los derechos de las personas transexuales. Está firmado por HazteOír y por CitizenGO, una plataforma promovida por la propia HazteOír y que persigue sus mismos fines a nivel internacional. Con el lanzamiento de este panfleto HazteOír ponía en marcha su actual campaña LGTBfoba, de la que el ya tristemente famoso «autobús del odio» es solo un paso más.
La difusión de la campaña de HazteOír por parte de ABC (y diarios locales como El Diario de Cádiz), aunque formalmente pueda ser considerado publicidad (es cierto que HazteOír goza de un importante respaldo económico gracias, entre otras cosas, a los beneficios fiscales para sus donantes derivados de su declaración como entidad «de utilidad pública» por el anterior ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz) supone sin duda un paso más en la escalada de odio a la que estamos asistiendo estas últimas semanas. Nos resulta imposible concebir que estas cabeceras hubiesen aceptado publicidad abiertamente racista o antisemita, por mencionar solo dos ejemplos. No parece sin embargo que la LGTBfobia, y más en concreto la transfobia, les merezca a sus editores el mismo reproche social.
Desde dosmanzanas, conscientes del escaso entusiasmo que hasta el momento ha mostrado la Fiscalía por perseguir la campaña de HazteOír, solo nos queda esperar que al menos en aquellas comunidades en las que ya se han aprobado leyes específicas contra la LGTBfobia se pongan en marcha las medidas oportunas para sancionar por vía administrativa lo sucedido. La Generalitat de Catalunya señalaba el camino este viernes, obligando al autobús de HazteOír a despojarse de la cartelería tránsfoba para poder retomar su camino.
Una portada animando a ir a misa… con un contenido tránsfobo
No sabemos si la casualidad o una muy bien organizada campaña de marketing ha querido que el mismo ejemplar que difunde el mensaje de LGTBfobia de HazteOír tenga como portada los rostros de personajes famosos y políticos que declaran orgullosamente que van a misa todos los domingos.
El objeto de la portada, en realidad, no es otro que arrojar leña al fuego de la polémica abierta por algunos dirigentes de Podemos sobre la necesidad de que en un escenario como el actual, donde la Iglesia católica dispone de canales de televisión y radio propios, la televisión pública española siga emitiendo misas católicas todos los domingos (como aquella en la que el obispo de Alcalá de Henares amenazó a los homosexuales con el infierno).
Entre los políticos que aparecen en la portada, además de varios destacados miembros del PP (como el ministro del Interior Juan Ignacio Zoido o su secretaria general y ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal), nos ha llamado la atención la presencia de políticos de partidos que sobre el papel defienden la laicidad del estado, como la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, y el presidente de Esquerra Republicana de Catalunya y vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras. Más allá de la sorpresa, en cualquier caso nos merece el mayor de los respetos que ambos políticos se muestren orgullosos de su fe religiosa, pero no estaría de más saber si al menos ellos, pertenecientes a dos partidos que en estos momentos defienden los derechos LGTB y cuyos representantes públicamente han condenado a la campaña tránsfoba de HazteOír, habían sido informados de la peculiar coincidencia.
Escandalosa y perversa campaña la del ABC, que es otra prueba de que HazteOir con cuarenta empleados a sueldo, que finalmente pagamos todos, no es un verso suelto sino el actor visible de las fuerzas ultras.