Ciclo «Cine que entiende»: Golem celebra el World Pride Madrid 2017 con las mejores películas LGTB
Durante los dos años que llevo al frente de esta columna cultural, Golem ha destacado como una de las distribuidoras cinematográficas españolas más comprometidas con el cine LGTB, como muestra su presencia en los Premios Apolo que creé en reconocimiento a las películas de temática LGTB estrenadas comercialmente dentro de nuestras fronteras. Así, en la primera edición Golem conquistó el palmarés, haciéndose Pride con las menciones a mejor película, guion original y reparto y Una nueva amiga con las respectivas a mejor actor, vestuario y maquillaje. En la competitiva segunda edición la distribuidora no logró formar parte del palmarés, pero sí asomó la cabeza en las nominaciones gracias a dos necesarios filmes de temática lésbica y feminista: Un amor de verano y Bar Bahar. Pues bien, en celebración del World Pride Madrid 2017, la distribuidora (que también es exhibidora) ha organizado un fantástico ciclo donde, además de los cuatro títulos mencionados, quienes se acerquen a la capital podrán disfrutar en pantalla grande de algunas de las mejores cintas de temática LGTB de los últimos años, a saber Carol, Tomboy, El desconocido del lago, Rara y la receptora del último Óscar a mejor película, Moonlight. En “Apolo vive enfrente” tengo la suerte de contar con nueve entradas dobles para sortear, para lo cual sólo tenéis que contarme (bien en esta misma columna, bien en las redes sociales de dosmanzanas) qué película del ciclo os gusta más y por qué. Pero antes, voy a hablaros un poco de cada uno de estos imprescindibles títulos.
Bar Bahar. Entre dos mundos (Bar bahr, Maysaloun Hamoud, 2016) sigue el destino de tres mujeres palestinas que tratan de abrirse paso en una sociedad israelí mucho menos inclusiva de lo que debería. Las debutantes Mouna Hawa, Shaden Kanboura y Sana Jammalieh encarnan a tres jóvenes obligadas a luchar día a día por vivir sus vidas tal y como desean vivirlas entre el machismo imperante. Además de ser muy entretenida, este drama social es un valiente acto de rebeldía. [Más aquí]
Carol (Todd Haynes, 2016) es la esperada adaptación de la novela homónima de Patricia Highsmith publicada en 1952, famosa por atreverse a retratar un romance homosexual desde una perspectiva relativamente esperanzadora. En este melodrama moderno todo es perfecto, desde el sutil guion hasta la envolvente música, pasando por supuesto por la reveladora fotografía, la medida dirección y el excelente trabjo protagónico de Cate Blanchett y Rooney Mara. Una obra maestra instantánea que mejora con cada visionado. [Más aquí]
El desconocido del lago (L’inconnu du lac, Alain Guiraudie, 2013) torna un apacible lago turquesa, primero, en lugar de encuentro gay y, después, en cuna del misterio. El atractivo Pierre Deladonchamps hace nudismo entre la sincera amistad con el bonachón encarnado por Patrick d’Assumçao y el oscuro deseo por el inquietante adonis al que da vida Christophe Paou. Que la fogosidad de los encuentros sexuales no impida apreciar la magnífica dirección de Alain Guiraudie, quien admitió que esta cinta fue su forma de confrontar su propia sexualidad. [Más aquí]
Moonlight (Barry Jenkins, 2016) cuenta, a través de una puesta en escena tan hermosa como sutil, la historia de un joven afroamericano que afronta la homosexualidad en el conflictivo Miami de los 80 y 90. Alex R. Hibbert, Ashton Sanders y Trevante Rhodes encarnan al chico con pura honestidad a lo largo de una infancia de complicadas relaciones filo-parentales, una adolescencia atrapada entre el bullying y el primer amor y una madurez que aparenta independencia mas es incapaz de dejar atrás el pasado. [Más aquí]
Pride (Orgullo) (Pride, Matthew Warchus, 2014) nos traslada al Reino Unido en 1984, cuando el desastre laboral causado por la mano de hierro de Margaret Thatcher dejó a muchas familias en la calle. En medio de la desesperación, un grupo de gais y lesbianas decide crear el LGSM (Lesbians and Gays Support Miners), recaudando una gran suma de dinero que los prejuicios les impiden emplear para lo que desean: ayudar a los parados. Tan emotiva como hilarante, esta gran película es todo un canto de esperanza. [Más aquí]
Rara (Pepa San Martín, 2016) es un ataque frontal a la homofobia imperante ejercido mediante la mejor arma: la sutileza. Así, la historia de dos niñas (impagablemente espontáneas Julia Lübbert y Emilia Ossandon) que, desde el divorcio de sus padres, viven con su madre y la pareja de esta es un ejemplo perfecto de cómo la sociedad nos inculca homofobia desde que nacemos. La natural película parte del polémico caso real de la jueza Karen Atala, a la que fue arrebatada la custodia de las hijas por el mero hecho de ser homosexual. [Más aquí]
Tomboy (Céline Sciamma, 2011) es una apasionante mirada a la transexualidad infantil (que, sí, existe, por mucho que los hipócritas se lleven las manos a la cabeza al oírlo) a través de la historia de Laure (gran Zoé Héran), quien, pese a ser identificad@ socialmente como niña, aprovecha su aspecto masculino para pasar por chico. La siempre reivindicativa Céline Sciamma ofrece un delicioso retrato de la infancia, una etapa bastante más compleja de lo que aparenta. [Más aquí]
Un amor de verano (La belle saison, Catherine Corsini, 2015) explora el movimiento de liberación femenina de los años 70 a través de la relación entre una joven lesbiana de campo que se muda a la capital en busca de la independencia económica y una mujer de ciudad que permanece felizmente emparejada con un hombre hasta que se da de bruces con la atracción que su propio género le granjea. Las grandes interpretaciones de Izïa Higelin, Cécile de France y Noémie Lvovsky impulsan un guion algo convencional. [Más aquí]
Una nueva amiga (Une nouvelle amie, François Ozon, 2015) es una divertida comedia dramática al más puro estilo Ozon sobre la aceptación de la muerte de una angelical mujer por parte de su mejor amiga y su marido, quienes pasarán así a cuestionarse su propia percepción del género y la sexualidad. La magnificencia tanto de la puesta en escena como de las interpretaciones de Romain Duris y Anaïs Demoustier da perfecta vida a un complejo guion que aborda la identidad trans desde un sorprendente nuevo punto de vista. [Más aquí]
Como veis, todos y cada uno de los títulos que engloban este ciclo merecen vuestro tiempo, siendo al tiempo perfectos acercamientos a identidades sexuales ajenas a la heteronormatividad, estupendos entretenimientos y, por supuesto, memorables obras de arte. Recordad que para participar en el sorteo de nueve entradas dobles, sólo tenéis que contarme qué película del ciclo os gusta más y por qué. ¡Mucha suerte!
A continuación, os dejo con la relación de títulos y horarios del ciclo:
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Acerca del Author
JuanRoures
Escritor y activista, hablo de cine en 'La estación del fotograma perdido', de dudas lingüísticas en '¿Cómo se dice?' y de cultura LGTB en 'dosmanzanas' (sección: 'Apolo vive enfrente'). He publicado la novela 'Bajo el arcoíris' y dirigido el cortometraje 'Once bitten, twice daring', ambos de temática gay. También soy corrector ortotipográfico y de estilo. Trabajo en la UAM.
Mi película favorita del ciclo es PRIDE, porque lo pasé genial con ella 🙂 Espero que alguien pueda disfrutarla (¡lástima no vivir en Madrid!).
No he visto Tomboy, pero siento curiosidad. La transexualidad infantil existe y es necesario que deje de ser un tabú. No se trata de algo nuevo, siempre ha habido niños y niñas transexuales. En realidad, muchos hombres y mujeres transexuales hemos sabido cuál era nuestra verdadera identidad desde una edad muy temprana, incluso aunque no se lo dijéramos a los adultos.
Respecto a la película (y hablo desde el desconocimiento, porque, como he dicho antes, aún no la he visto), quizás el título no sea del todo adecuado. Tomboy es una palabra que los anglosajones utilizan para referirse a aquellas CHICAS poco femeninas, que tienden a desempeñar roles tradicionalmente asociados al género masculino. En castellano, la palabra más parecida es marimacho. Sin embargo, una chica «masculina» NO es un chico transexual, ni siquiera es un chico transgénero. Es cierto que muchos chicos transexuales hemos sido considerados como «marimachos», pero eso era antes de «salir del armario» como hombres, ya que, ante los ojos de la sociedad, todavía éramos vistos como mujeres. En cualquier caso, la palara tomboy o marimacho, sea o no utilizada con una connotación peyorativa, sólo se aplica a mujeres. Un hombre (o un niño) transexual es, ante todo, un hombre. Por ese motivo, un varón transexual en ningún caso puede ser «marimacho».
El título puede parecer un detalle sin importancia, pero la cosa cambia si tenemos en cuenta que las palabras son el reflejo de lo que pesamos. Si la película pretende narrar las vivencias de un NIÑO transexual (o transgénero), el título es del todo impreciso, por no decir inapropiado. Digamos que es justo lo opuesto a «La CHICA danesa», que cuenta la historia de la que es considerada la primera MUJER transexual.
Los hombres transexuales posiblemente seamos unos de los colectivos más invisibles dentro de la comunidad LGTBI. No obstante, NO vale cualquier tipo de visibilidad, sino una que se adecué a la realidad.
Obviamente, quería decir que las palabras son el reflejo de lo que PENSAMOS. 😉
La película que más me interesa es Tomboy, porque creo que dentro de todo el colectivo LGTB son los que están más estigmatizados, aún más de lo que estamos los homosexuales o están los bisexuales. Me parece más interesante aún porque trata la transexualidad en la infancia, con todas las personas que creen que un niño no pueden sentirse de un género que no es el suyo o que no puede decidir o saber quién es.
Un saludo y gracias por el sorteo.
Mi película favorita del ciclo es Rara, por lo bien que retrata la vida de las familias homoparentales.
Me encantó Una nueva amiga, muy divertida. De las que me faltan, me encantaría ver El desconocido del lago. Saludos.
Me interesa mucho Rara, a ver si me toca!! La verdad es que solo he visto Pride y Carol, justo porque ambas ganaran los premios de los que hablas al principio, y me gustaron mucho las dos.
Es un ciclo muy interesante con pelis de mucho atractivo. De las que he podido ver, destacaria Pride, porque se disfruta de principio a fin y te hace salir del cine sonriendo y de manera positiva.
«Rara» fue una gran sorpresa, de un naturalismo delicioso y nada complaciente 🙂
Me quedo con Carol por varios motivos, uno su duo protagonista y dos la época y la mezcla con el cine clásico de hollywood.