«120 pulsaciones por minuto» y «Una mujer fantástica», triunfadoras de los Premios Sebastiane 2017
Hoy concluye el Festival Internacional de Cine de San Sebastián, pero ya conocemos las obras ganadoras de los Premios Sebastiane, el galardón que a iniciativa de Gehitu comenzó a concederse en el año 2000 a la mejor obra de temática LGTB de entre las que participan en cualquiera de las secciones del Festival, de modo similar a los que se conceden en otros importantes festivales internacionales de cine (como el Teddy berlinés, la Palma Queer de Cannes o el Queer Lion de Venecia). Desde 2013 se concede además un segundo galardón, el Premio Sebastiane Latino. Dos magníficas películas que ya se han alzado con premos en Cannes y Berlín.
La ganadora de la 18ª edición del Premio Sebastiane no es otra que 120 battements par minute (“120 pulsaciones por minuto”, es su título oficial en castellano), del francés Robin Campillo, que ya se hizo en mayo con la Palma Queer (en Cannes, de hecho, fue una de las triunfadoras de la sección oficial: logró el Gran Premio del Jurado y el Premio de la Crítica). La película supone un homenaje al activismo de Act Up-Paris, histórico grupo francés en favor de las personas con VIH/sida, fundado en 1989 e inspirado en la misma filosofía de “acción directa” que otros grupos ya habían empezado a desarrollar en Estados Unidos. Un grupo que aún hoy sigue siendo una referencia para el activismo europeo.
«Por ser una película que sin dejar de recuperar para toda la sociedad la memoria de los gais y del sida reivindica como valores el compromiso, la lucha contra la injusticia, la valentia, la superacion o la alegría. Y a la vez habla de intimidad y amor, esa fuerza que rompe etiquetas. Por dar visibilidad histórica a la lucha solitaria de los jovenes de los ochenta y noventa por sobrevivir a la enfermedad, apoyarse y concienciar contra los poderes que deberían haberles protegido y la sociedad que debería haberlos cuidado. Porque con su compromiso hasta la muerte salvaron vidas», justifica el jurado del Premio Sebastiane el galardón. También «porque Robin Campillo y su equipo demuestran que se puede hacer cine de una gran factura técnica, narrativa, plástica e ideológica y llegar a todo tipo de públicos».
La película de Robin Campillo (que también es responsable del guión) está protagonizada por Arnaud Valois y Nahuel Pérez Biscayart. Este es el tráiler:
Sebastiane Latino, para la chilena Una mujer fantástica
La 5º edición del Sebastiane Latino, por su parte, ha sido para la película chilena Una mujer fantástica, de Sebastián Lelio. Otra cinta ya premiada en el circuito europeo de grandes festivales, puesto que se alzó, el pasado febrero, con el Teddy 2017 en la Berlinale, que también concedió a la cinta el Oso de Plata al mejor guión.
Una mujer fantástica relata la vida de Marina, una chica trans interpretada por Daniela Vega, que tras el fallecimiento repentino de su pareja Orlando (interpretado por Francisco Reyes), un hombre mayor que ella y cuya familia rechaza por completo a Daniela, se enfrenta a la discriminación tránsfoba: le niegan el derecho a estar presente en su funeral, e incluso trata de culpabilizarla de su muerte:
Como ya en en febrero subrayábamos, Una mujer fantástica destaca además por el hecho de estar interpretada por una actriz trans. Daniela Vega, cuyo nombre llegó a estar entre los favoritos a hacerse con el Oso de Plata a mejor actriz en Berlín, no solo no reniega de ser conocida como una actriz transexual, sino que se siente feliz por ello. «¿Cómo te sientes cuándo te califican como actriz transexual?», le preguntaban hace un año en la prensa chilena. «Siento que es un apellido que no me molesta, transexual o transgénero, como quieran, todo lo contrario, más que orgullo me da placer físico incluso. Y si tengo que volver a nacer, volvería a ser transexual. Soy orgullosa de ser transexual y mi cuerpo llegó para responderme un sinfín de cosas. Mi cuerpo llegó para entregarme un sinfín de libertades también y esas libertades las saqué de un sinfín de prohibiciones», respondía la actriz.
«Por construir con mucha sensibilidad el personaje de Marina, y mostrar las distintas aristas de un personaje femenino que debido a su transexualidad tiene que hacer frente a los prejuicios para poder despedirse del ser amado. Por mostrar el mundo trans alejado de cualquier estereotipo, como la prostitución y el espectáculo, para enseñarnos la vida cotidiana de una mujer luchadora, amante, educada y… fantástica», destaca el jurado del Premio Sebastian Latino a la hora de explicar su decisión. El jurado también agradece que la película «ponga de relevancia la necesidad de que existan leyes integrales de género para que el cambio nominal de las personas trans no se haga sólo a nivel oficial, sino que sirva para poder cambiar su identidad en todos los espacios públicos, como las bibliotecas o los clubes deportivos”. A su juicio, Una mujer fantástica «recalca la importancia de la palabra escrita, de la oficialidad. Sin papeles que reconozcan nuestro ser las personas se vuelven invisibles, carne de corrupción o quedan en manos del funcionario de turno que decide qué o quién somos”.
Dos películas, en definitiva, que estamos deseando poder ver en las salas de cine (su estreno en España está anunciado en próximas semanas). No han sido las únicas cintas de temática LGTB que se han podido disfrutar en San Sebastián, sin embargo. Juan Roures, responsable de nuestra sección Apolo vive enfrente, ha estado allí tomando buena nota, y nos lo contará en sus próximas columnas.