Canadá ha rescatado ya a varias decenas de refugiados LGTB del infierno checheno
Gran noticia que llega desde Canadá, un país decidido a convertirse en líder global en la defensa de los derechos LGTB. Varias decenas de refugiados han conseguido escapar de la persecución LGTBfoba en Chechenia gracias a un programa conjunto de Rainbow Railroad, una organización de la sociedad civil que ayuda a personas perseguidas por su orientación sexual o por su identidad de género, y el Gobierno de Canadá.
El programa, que se está llevando a cabo con la ayuda de Russian LGBT Network, una organización LGTB rusa que les proporciona refugio transitorio en tanto se tramitan los visados que les permiten volar a Canadá, un proceso que estaría siendo acelerado gracias a la voluntad política del Gobierno canadiense.
Hasta ahora, el programa ha mantenido un «perfil bajo», dadas sus implicaciones diplomáticas (no olvidemos que la República de Chechenia es parte de la Federación Rusa), pero el pasado viernes el director ejecutivo de Rainbow Railroad, Kimahli Powell, publicaba un vídeo en la página de Facebook de la organización en la que daba detalles de sus resultados a día de hoy. Según lo expresado en el vídeo, gracias al programa 31 refugiados LGTB chechenos disponen ya de acogida en el país, de los cuales 22 ya estarían físicamente instalados en sus lugares de destino. Lo insertamos a continuación (está en inglés):
Publicado por Rainbow Railroad en viernes, 1 de septiembre de 2017
Según ha declarado Powell a la CBC, la radio pública canadiense, el Gobierno de Canadá ha jugado un papel fundamental en puesta en marcha de la iniciativa. En concreto, Randy Boissonnault, consejero especial del primer ministro Justin Trudeau para asuntos LGTBQ, así como la minista de Asuntos Exteriores, Chrystia Freeland, y el ministro de Inmigración, Ahmed Hussen, se habrían interesado desde el primer momento. Se da la circunstancia de que Freeland, antes de ser ministra, era periodista, y en su momento cubrió la guerra de Chechenia entre los separatistas y las fuerzas leales a Rusia, por lo que es una muy buena conocedora de la situación en esa parte del mundo. Ahmed Hussen, por su parte, es de origen somalí y de religión musulmana, como buena parte de la pobación chechena.
Powell, en cualquier caso, no ha querido dar detalles de hasta qué punto el Gobierno de Canadá habría participado en el desarrollo del programa más allá de su obvia implicación en la aceleración de los visados. El director ejecutivo de Rainbow Canada ha declarado además que habría aún unas 40 personas LGTB chechenas en suelo ruso, ya alojadas en lugares seguros, pero esperando poder abandonar el país.
Chechenia, el infierno para las personas LGTB
La persecución sistemática de las personas LGTB en Chechenia, especialmente acentuada desde finales de 2016, es un monumental escándalo de violación de los derechos humanos que fue destapado a principios de abril por el diario ruso Novaya Gazeta y que, pese a las reiteradas negativas tanto de las autoridades chechenas como de las rusas, e incluso de los esfuerzos de los defensores de Vladimir Putin por presentarlo como una campaña de intoxicación occidental, informaciones posteriores de organizaciones de derechos humanos no han hecho sino confirmar.
Negativas que por otra parte no han impedido al presidente checheno, Ramzán Kadýrov, acusar a los homosexuales de ser «el demonio» y asegurar incluso que estaría dispuesto a perdonar los «crímenes de honor» cometidos contra ellos por sus propias familias.
¡Qué pena que este tipo de situaciones sean lo raro y no lo común!