El Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile se querellará por la detención de una pareja del mismo sexo y del activista Rolando Jiménez
El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (MOVILH) ha denunciado un «brutal ataque homofóbico policial a pareja del mismo sexo y a Rolando Jiménez» en la noche del 23 de junio. Al parecer, los hechos se desencadenaron cuando la citada pareja llamó a los carabineros para denunciar que estaban sufriendo discriminación en el restaurante en el que se encontraban cenando. Pero en lugar de asistirles a ellos, el subteniente Richard Cid Ruiz y el cabo primero Luis Freire Torrealba «sin consultarnos nada, ni pedirnos antecedentes o cédulas de identidad, nos trataron de ‘maricuecas’ y ‘maricones’, por lo que llamamos al dirigente del MOVILH, Rolando Jiménez, en busca de ayuda, quien en minutos se apostó en el lugar». El Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile se querellará por lo que considera detención «ilegal» de la pareja del mismo sexo y del activista Jiménez. Por otra parte, las reivindicaciones sobre el matrimonio igualitario, la ley de identidad de género y la adopción homoparental han reunido en los Orgullos LGTB de Arica, Santiago y Concepción a más de 100.000 participantes.
Según explica en un comunicado el MOVILH, «una pareja del mismo sexo y el dirigente Rolando Jiménez fueron víctimas de un brutal ataque homofóbico, detención y robo por parte de funcionarios de la Primera Comisaría de Santiago». El portavoz de la prominente organización igualitaria de Chile Óscar Rementería ha relatado que «el subteniente Ruiz comenzó a tratar a Rolando de ‘maricón’, ‘viejo chico’ y ‘hueco’, solo porque se quejó por el proceder policial. Mientras ello ocurría, el cabo Freire comenzó a golpear a un miembro de la pareja en su cabeza, intentó estrangularlo, mientras los subía a un furgón policial e insistía con tratarlos de ‘maricueca’».
Un miembro de la pareja, continúan explicando desde el MOVILH, grabó los insultos y la agresión, pero Cid Ruiz «se apropió del iPhone y nunca más lo devolvió». Asimismo, «los funcionarios luego golpearon a Jiménez, intentaron lanzarlo al suelo. Una vez en la Comisaría, nadie dijo a ninguno de los involucrados la razón de la detención ni les comunicaron sus derechos hasta 8 horas después».
Rementería alega que «de una manera absurda, finalmente a la pareja le notificaron que estaba detenida por suplantación de identidad, liberándolos nueve horas más tarde. En tanto, a Jiménez se llegó al ridículo de acusarlo de golpear al subteniente Ruiz para robarle su reloj. Esta es una situación gravísima, un abuso extremo, un montaje sin precedentes, que ocurre a semanas de que Jiménez denunciara abuso policial homofóbico de la Primera Comisaría contra una pareja del mismo que había asistido al restaurante Mamut».
Por su parte, el director de la Unidad Jurídica y Judicial del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Rodrigo Bustos, ha aclarado que «al recibir esta denuncia, lo que vamos a hacer, puesto que se trata de hechos tremendamente graves, por la violencia, las irregularidades y por los insultos de carácter homofóbico, es presentar en los próximos días una acción judicial». Para Bustos, «la falta de los funcionarios de la Primera Comisaría de Carabineros» tiene el agravante de haberse cometido contra Rolando Jiménez en su calidad de defensor de derechos humanos, puesto que su detención se produjo solo porque había acudido al centro de Santiago para asistir a la pareja del mismo sexo.
Éxito en los Orgullos LGTB de Chile
Más de 100.000 personas participaron el pasado el sábado en las distintas marchas del Orgullo LGTB que se desarrollaron en Santiago, Arica y Concepción, en las que se exigía avanzar en cuestiones fundamentales para la agenda igualitaria como la adopción homoparental, el matrimonio, la inclusión de menores de 14 años en la Ley de Identidad de Género y el pleno cumplimiento a los compromisos asumidos por Chile ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Sobre la manifestación de Santiago (capital del país) el MOVILH ha declarado que «esta marcha es muy especial, pues por primera vez la organizamos de manera conjunta con Fundación Iguales. Con esta unidad redoblamos nuestra lucha y enfatizamos la necesidad de que el Congreso Nacional dé pronta luz verde a la ley de identidad de género, al matrimonio igualitario y a la adopción homoparental. Mientras ello no ocurra, seguiremos siendo ciudadanos de segunda categoría».
La presente edición del Orgullo ha presentado algunas reseñables novedades como la aplicación de la prueba rápida del VIH a los presentes que lo solicitaron, así como la participación de empresas invitadas por la Fundación Iguales.