El Gobierno alemán introduce «diverso» como tercera opción de género legal
Las personas intersexuales y no binarias de Alemania podrán registrar su género legal con la opción de «diverso», que se añadirá a las ya existentes de «masculino» y «femenino». Es la solución que ha adoptado el Gobierno de Angela Merkel y que da cumplimiento a una sentencia del Tribunal Constitucional de noviembre del año pasado. Los colectivos LGTBI y la oposición de izquierdas saludan el cambio, pero se oponen enérgicamente al requisito de presentar un certificado médico para poder ejercer el derecho a registrarse bajo el nuevo género legal.
En noviembre de 2017, el Constitucional alemán emitía una sentencia histórica al fallar a favor de Vanja, una persona que solicitaba la inscripción de su género legal como «inter/diverso». Su batalla judicial comenzó el verano de 2014. Disconforme con un género legal que no se corresponde con su identidad, presentó una solicitud en el registro civil de una localidad cercana a Hanóver para cambiarlo de «femenino» a «inter/diverso». Su requerimiento fue denegado y Vanja denunció su caso ante la justicia, donde obtuvo respuestas negativas en todas las instancias a las que recurría hasta que llegó al Tribunal Constitucional, que finalmente le dio la razón.
Según los jueces del alto tribunal, el derecho al libre desarrollo de la personalidad recogido en el artículo 2 de la norma fundamental alemana incluye la protección de la propia identidad y expresión de género, que es una condición indispensable para poder ejercer dicho derecho. Además, negarles el reconocimiento a las personas que no se identifican ni con el género masculino ni con el femenino constituye una discriminación por razón de género prohibida por la Constitución. El tribunal tampoco consideró una solución satisfactoria la ley aprobada hace cuatro años, que abría la posibilidad de dejar en blanco el campo del género. El motivo es que esta opción da a entender que las personas afectadas carecen de género, cuando la realidad es que su género no se corresponde con los dos binarios.
El Constitucional dio de plazo hasta el 31 de diciembre de 2018 al Bundestag para que regule el derecho a la identidad de género de todos los ciudadanos, sea mediante la introducción de un tercer género o la eliminación de toda referencia al género en el registro civil y los documentos oficiales. El Gobierno federal ha optado por la primera posibilidad. En cuanto al término para designar la nueva opción de género, si bien hace dos meses el ministerio del Interior se inclinaba por «otro», finalmente el elegido ha sido «diverso», que se añadirá a los existentes de «masculino» y «femenino». Seguirá estando disponible la posibilidad de dejar en blanco el campo del género.
La categoría de «diverso» solo la podrán utilizar las personas de más de 14 años de edad, salvo en casos excepcionales. Además, para inscribirse bajo esta opción de género será necesaria la presentación de un informe médico. Los activistas LGTBI rechazan en particular este requisito, que consideran inconstitucional por seguir patologizando a las personas intersexuales o de género no binario. Se sienten también decepcionados por el alcance limitado de la nueva norma, que no aborda las reivindicaciones de la comunidad trans.
La oposición de izquierdas (Die Linke y Los Verdes) ha tachado la medida del Gobierno de «falta de ambición» y «paternalista» y reclaman un procedimiento sencillo para la modificación registral que respete la autodeterminación de género. También los liberales del FDP se han mostrado contrarios a la tutela médica. La ministra de Familia, la socialdemócrata Franziska Giffey, ha reaccionado a estas críticas anunciando un próximo proyecto de ley para «el reconocimiento y el fortalecimiento de la diversidad de género». La reforma de la ley de identidad de género para eliminar el requisito previo de un dictamen judicial es una larga reivindicación de los colectivos trans alemanes, que el acuerdo de Gobierno entre la CDU/CSU y el SPD de febrero de este año volvió a ignorar.
A pesar de estas limitaciones que aún están por superar, Alemania se situará en el grupo de cabeza por lo que se refiere al reconocimiento legal de las personas intersexuales y de género no binario. Se trata de medidas que han adoptado países como Australia en 2011 o Canadá y Malta el año pasado. La posibilidad de registrarse bajo un tercer género o de dejar en blanco el género ha sido regulada de diferentes formas en países como la India o Nepal. Tribunales de Austria y Holanda también han abierto la puerta al derecho a registrarse bajo una tercera opción de género este mismo año.