La serbia Ana Brnabić, primera jefa de Gobierno abiertamente homosexual en ser madre durante su mandato… de un niño del que no figurará como madre legal
La primera ministra de Serbia, Ana Brnabić, se ha convertido en la primera jefa de gobierno abiertamente homosexual en tener un hijo durante su mandato. Eso sí, debido a la ausencia de una legislación que proteja los derechos de las familias homoparentales en su país, Brnabić no podrá figurar, al menos de momento, como su madre legal, ya que el niño fue gestado por su pareja, Milica Đurđić.
La propia oficina de la primera ministra anunciaba el nacimiento, el pasado 20 de febrero, del pequeño Igor, concebido mediante técnicas de reproducción asistida, y añadía que tanto el bebé como la madre se encontraban bien. El comunicado hacía alusión, curiosamente, al hecho de que Ana Brnabić fuera la primera persona al frente de un Gobierno con pareja del mismo sexo que tuviera un hijo durante su mandato.
Ya hemos hablado en diversas ocasiones de la primera ministra serbia. De 43 años y nacida en Belgrado, Ana Brnabić no pertenece formalmente a ningún partido político. Estudió Administración de Empresas en los Estados Unidos, completó su formación postgraduada en marketing en el Reino Unido y habla inglés y ruso. Su designación en 2017 como primera ministra por Aleksandar Vučić, el presidente de Serbia, generó fuertes críticas de los partidos más ultraconservadores, críticos con su condición de mujer abiertamente lesbiana. Pese a todo, el Parlamento serbio, controlado por mayoría absoluta por el Partido Progresista de Vučić (que pese a su nombre es una formación conservadora, miembro desde 2016 del Partido Popular Europeo) la confirmó sin mayores problemas.
Brnabić se convirtió de este modo en la quinta persona abiertamente homosexual en ocupar la jefatura de un gobierno: antes de ella dirigieron o dirigen sus países la islandesa Jóhanna Sigurðardóttir (entre 2009 y 2013), el belga Elio Di Rupo (entre 2011 y 2014), el luxemburgués Xavier Bettel (desde 2013) y el irlandés Leo Varadkar (desde 2017). Ya en el cargo, nos dejó una imagen que se puede calificar de histórica con su participación en la manifestación del Orgullo LGTB de de 2017 en Belgrado. Era la primera vez que un jefe del Gobierno acudía a la marcha. En mayo del año pasado volvíamos a referirnos a Brnabić, al hacernos eco de su contundente reacción al exabrupto homófobo de uno de sus ministros.
Nos congratulamos, como no puede ser de otra forma, de la maternidad de Brnabić, pero no está de más incidir en la paradoja que supone que su propia oficina haga público el anuncio en un país que no reconoce jurídicamente las parejas del mismo sexo ni la homoparentalidad. Según el último informe anual de ILGA Europa sobre la situación de los derechos LGTBI en el continente europeo, de hecho, Serbia ocupa la posición 28 de 40, con solo un 29,68% de los objetivos ideales conseguidos. Confiemos en que la visibilidad que supone la maternidad de Brnabić contribuya a generar un clima social que permita, en este sentido, avances más rápidos.