Un hombre gay de 38 años pierde la visión de un ojo tras una agresión homófoba en el centro de Madrid
Nuevo episodio de violencia LGTBfoba. Un chico gay de 38 años sufrió el pasado sábado una brutal agresión homófoba en pleno centro de Madrid, mientras se dirigía caminando a su casa. Otro varón, que en ese momento se encontraba discutiendo en la calle con una chica, se dirigió a él con gritos e insultos homófobos y, acto seguido, le propinó un fuerte puñetazo en la cara. Como consecuencia del golpe, la víctima tuvo que ser operada de urgencia en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid. Como consecuencia, ha perdido la visión de un ojo. Se desconoce por el momento si la pérdida de visión será definitiva o podrá recuperarla tras un trasplante de córnea.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado sábado 12 de octubre —poco después de las tres y media de la madrugada—, en la confluencia de la calle Valverde con la Gran Vía de Madrid. La víctima, un hombre hostelero y drag queen de 38 años, se dirigía solo a su casa, en el barrio de Chueca y donde actualmente vive con su pareja, después de haber pasado una noche de fiesta en la conocida discoteca La Boite. En el camino, se cruzó con un hombre que en ese momento mantenía una fuerte discusión con una mujer. En un momento dado, y por desgracia para él, el hombre, de complexión corpulenta, empezó a increparle y le gritó «¿Tú qué miras, maricón de mierda?». Acto seguido, y aunque el agredido decidió seguir caminando, el agresor se dirigió hacia él y, sin mediar palabra y atacándole por la espalda, le propinó un fuerte puñetazo en la cara que le tiró al suelo. Tras la agresión, el matón y la mujer con la que discutía huyeron rápidamente del lugar.
El golpe fue tan fuerte que hizo que las gafas de la víctima se rompieran y que varios trozos de cristal se introdujeran en uno de sus ojos. La víctima fue asistida poco después por una pareja que pasaba por allí y que rápidamente llamó a la Policía Nacional. Los agentes fueron los que dieron el aviso a los servicios de emergencia, que trasladaron rápidamente al hombre al Hospital Fundación Jiménez Díaz de Madrid. «Le reconstruyeron el iris y recibió más de 15 puntos internos de sutura», señalaba su pareja al diario ABC.
La tarde siguiente a la agresión, la hermana de la víctima interpuso una denuncia ante la Policía. Por desgracia, la lesión de la víctima ha resultado más grave de lo que en un principio parecía. Aunque se esperaba que el agredido fuese sometido a una nueva intervención este jueves para realizarle un trasplante de córnea, el hombre ha perdido de momento la visión de un ojo.
La Asociación Respeta LGTBH, que tuvo conocimiento de lo ocurrido el mismo sábado, ha emitido un comunicado lamentando y condenando profundamente la agresión. «Estamos viviendo un momento en el que la sociedad está cada vez más polarizada y donde las agresiones que entran dentro de la clasificación de delitos de odio, en base al artículo 510 del Código Penal, está en auge. Necesitamos, como sociedad y como colectivo, acabar con esta radicalización de la población y con las agresiones por motivos de odio que cada vez ocurren con más frecuencia», reza el texto.
Por desgracia, lo ocurrido hace unos días no supone un hecho aislado. Solo hay que echar un vistazo a los datos que maneja el Observatorio Madrileño contra la LGTBfobia, que presentó hace unos meses su informe anual, correspondiente al año 2018. La entidad recogió durante este periodo un total de 345 incidentes de odio motivados por LGTBfobia en la Comunidad de Madrid, 24 más que en el año precedente. Mucho por hacer aún.