Condena múltiple por «sodomía» en Turkmenistán: dos años de cárcel para los acusados
Medios locales y la organización Human Rights Watch informan de la sentencia de dos años de cárcel a un número indeterminado de hombres acusados de «sodomía» en Turkmenistán. Los arrestos se produjeron en el mes de marzo y el juicio tuvo lugar el pasado 7 de mayo, aunque la noticia no trascendió hasta hace unos días. Entre los condenados se encuentra un popular presentador de televisión. La república de Asia central es una de las dictaduras más herméticas del mundo y, junto con Uzbekistán, una de las que contemplan penas de prisión para las relaciones homosexuales entre hombres.
Durante la segunda mitad de marzo, unos doce hombres jóvenes fueron detenidos en Ashgabat, la capital del país, bajo la sospecha de comportamiento homosexual. Entre ellos se encontraba un conocido presentador de televisión que responde a las iniciales G. S., así como su pareja. Varios de los arrestados fueron puestos en libertad a cambio de depositar una cantidad de dinero. Dado el hermetismo que impera en el país, uno de los regímenes más impenetrables del mundo, la noticia no se conoció hasta mediados de abril.
Más de un mes después, ha trascendido que el juicio tuvo lugar el pasado 7 de mayo. Los que aún permanecían arrestados fueron sentenciados a dos años de prisión por «sodomía», un delito tipificado en el artículo 135 del código penal turcomano. G. S. se cuenta entre los condenados, que habrían firmado una confesión escrita. Tampoco ha obtenido su libertad el hijo de un diplomático. Se desconoce el número exacto de hombres que permanecen en prisión.
La república de Turkmenistán es una de las dictaduras más inaccesibles y represivas del mundo. Junto con Uzbekistán, son las dos únicas ex repúblicas soviéticas que contemplan penas de prisión para las relaciones sexuales entre hombres. Los pocos informes existentes sobre las condiciones de vida de la comunidad LGTB revelan un clima de acoso y extorsión a hombres gais y bisexuales a los que la policía localiza y engaña mediante el uso de aplicaciones de contactos. Según recoge el informe 2019 de ILGA sobre homofobia de Estado, ya en 2013 Amnistía Internacional ofrecía «información creíble sobre agentes estatales que atacan, hostigan y extorsionan a hombres homosexuales y que les obligan a ‘denunciar’ a otros hombres homosexuales y revelar sus identidades». En 2015, el documental Turkmenistán: la homosexualidad prohibida se estrenó en el Festival Internacional de Cine Documental de Oslo. La película documenta la historia de un joven del país acusado de «actos homosexuales» y condenado a prisión que cuenta su experiencia con el sistema de justicia local, desde el momento de su detención hasta su puesta en libertad, incluidos informes de amenazas, insultos, torturas y violencia sexual. El testimonio también hace referencia a cómo los médicos exponen a los sospechosos a procedimientos degradantes. De hecho, según una investigación realizada por Human Rights Watch en 2016, agentes de seguridad y personal médico someten a las personas detenidas por actos sexuales con personas del mismo sexo a exámenes anales forzados.
En 2019, el médico Kasym Garayev se convirtió en la primera persona en revelar públicamente su condición de gay, en un vídeo en el que denunciaba el acoso escolar y los intentos de suprimir su orientación sexual que había sufrido. Tras intentar huir a Turquía, su familia lo localizó y lo devolvió a Turkmenistán.